Las referencias del Viejo Continente pierden casi todo lo ganado en el mesLas medidas anunciadas por SuperMario se quedaron cortas para un mercado ávido de más estímulos, llevando a un descalabro en el mercado de renta fija que provocó pérdidas del 2 por ciento, de media, en el bolsillo del inversor que tuviera en cartera bonos de la zona euro. España e Italia fueron los más perjudicados y el valor de la deuda de referencia a diez años se depreció en más de 2 puntos porcentuales solo en la sesión, volviendo a niveles no vistos prácticamente en un mes. En el caso del español, la rentabilidad del bono alcanzó el 1,73 por ciento y la del italiano, el 1,64 por ciento. Y con razón, la diferencia entre comprar 60.000 millones de euros en bonos mensualmente a los 80.000 millones que esperaba el mercado es considerable. En consonancia con ello, la prima de riesgo española, que mide la diferencia entre la rentabilidad del bono español a diez años con la de su homólogo alemán, subió 5 puntos con respecto al día anterior, hasta cerrar en los 106 puntos básicos. Claro que no fueron los únicos, el precio del bono francés a una década cayó un 1,94 por ciento, seguido del portugués, que se depreció un 1,89 por ciento. El bund alemán fue el menos castigado por el mercado, aunque provocó una pérdida del 1,8 por ciento a los inversores. Así, su rentabilidad media se situó en el 0,66 por ciento. Y es que el mercado se había fijado muy altas las expectativas. Tanto que en el último mes se había producido un rally en la renta fija europea que había provocado ganancias medias del 3 por ciento en el bolsillo del ahorrador. Uno de los efectos del exceso de optimismo “ha sido un aumento significativo en la rentabilidad de los bonos a corto y largo plazo, deshaciendo las caídas del último mes”, explica Olivier Arpin, economista de UBP. En este marco, Cosimo Marasciulo, responsable de renta fija soberana de Pioneer Investmentes, sugiere “que la rentabilidad de los bonos puede experimentar cierta presión al alza a principios de 2016”. Financiación más barata El Tesoro Público se anticipó ayer a la reunión del BCE y consiguió colocar bonos a diez años a un tipo de interés medio del 1,46 por ciento, sin encarecer sus costes. Con ello, al organismo emisor sólo le quedan 2.100 millones para conseguir el objetivo de captación a medio y largo plazo de 2015. Ya tiene un 98,5 por ciento.