La operadora subió ante la posibilidad de una venta de la división de móviles de la italiana MADRID. Telefónica le ha cogido gusto a protagonizar las primeras sesiones de la semana. Si el martes pasado, Deutsche Bank y UBS recortaban su recomendación sobre la operadora española, haciéndola caer durante la semana un 2,8 por ciento y arrastrar así al Ibex a las pérdidas. Ayer vivió la situación opuesta. Un informe de Merrill Lynch elevando su precio objetivo de 14 a 14,5 euros dio el apoyo necesario para que Telefónica se revalorizara un 0,9 por ciento, hasta 13,18 euros, y ya de paso amortiguase las pérdidas del Ibex. De hecho, fue entre las 11 y las 12 de la mañana -hora en la que los inversores se lanzaban a comprar títulos de la operadora- cuando comenzó a remontar el índice. Además, la subida de la empresa estuvo acompañada de un volumen que si bien no fue superior al que acostumbra a promediar, si fue considerable dado que la bolsa sigue sin alcanzar su mejor nivel del año.Merrill Lynch basó su subida del valor ideal al considerar a Telefónica como "una de las mejores opciones entre las 'telecos' europeas" y asegurar que el objetivo que se marcó de duplicar su dividendo en 2009 es "alcanzable". Así, asegura que sus acciones ya reflejan el incremento en la competencia que se producirá en el mercado español a partir de 2007, con la llegada de Xfera, la 'aparición' de Orange y las nuevas operadoras a través de Internet. Asimismo, el banco de inversión cree que la compañía se verá beneficiada por su diversificación geográfica. "Latinoamérica todavía ofrece posibilidades de ganar dimensión, mejora de los márgenes y una fuerte generación de caja", indica el informe, que añade que otra virtud es que "O2 es uno de las mejores operadores móviles de Europa y, aunque el mercado alemán es competitivo, ganará cuota".Más impulsoPero Telefónica no sólo se vio beneficiada por el informe. Tanto la española como sus rivales europeas -France Telecom subió un 3,5 por ciento y Deutsche Telekom, un 2,85 por ciento- agradecieron las noticias procedentes de Italia, donde las especulaciones en torno a la venta de la división de móviles de Telecom Italia marcaron la atención de los inversores. Algo que no confirmó ni desmintió la compañía italiana, que lo que sí hizo fue anunciar la segregación de la división.El resto de 'telecos' del sector se frotaron las manos ante la posibilidad de que esto ocurriese y que sus divisiones de móviles se revaloricen gracias a una posible operación. Otro de los rumores del mercado apuntaba a la posibilidad de que Telefónica tratase de comprar la división, algo que podría derrumbar el plan anunciado en la conferencia de Valencia en mayo.