La firma cotiza con un PER de 13,66 veces, frente a las 17,65 veces en las que se sitúa su media de los últimos 15 añosHay que echar la vista atrás para ver a Indra cotizando con un PER -veces que el precio recoge el beneficio- por encima de la 40 veces. Concretamente, hasta el 2000 (en plena burbuja tecnológica) cuando el precio de sus títulos llegó a superar los 12 euros. Quince años después, el multiplicador de beneficio de la compañía se sitúa en las 13,66 veces, es decir, con las ganancias estimadas para los próximos doce meses, el inversor que tome posiciones tardará casi 14 años en recuperar su dinero por la vía del beneficio. Esto se traduce en que los títulos de Indra se compran casi un 23 por ciento más baratos que en su media histórica (los últimos quince años), que se sitúa en 17,65 veces. "El PER de Indra había caído muy por debajo de su media histórica y el que se supone a una compañía de un sector de crecimiento como el de software. Esto refleja la desconfianza del mercado después de varios trimestres en que no se concretaba el inicio de recuperación de los beneficios que la compañía venía anunciando repetidamente", apuntan desde M&G Valores. Un hecho que se refleja en bolsa, ya que sus títulos están a más de un 33 por ciento de los máximos de 2014. "En octubre se plantearon dudas sobre la veracidad de sus cuentas lo que hizo que se desplomase en bolsa alrededor de un 30 por ciento, bajando el precio de la cotización y situando su PER por debajo de la media histórica", explican desde el equipo de Gestifonsa. Sin embargo, parece que la mejora está en camino. De hecho, en lo que llevamos de ejercicio, Indra se apunta un alza en torno al 21 por ciento y se sitúa entre las diez compañías más alcistas del Ibex 35, tras el anuncio de Telefónica de tomar un 3,16 por ciento del grupo. Una recuperación que también llegará de la mano de los beneficios, según las estimaciones que recoge Bloomberg, tras las pérdidas de 92 millones con las que cerró el ejercicio de 2014, se prevé que la firma vuelva al beneficio en 2015, con 120,5 millones de euros, que se incrementarán un 12,4 por ciento (hasta los 135,5 millones) en 2016 -ver gráfico-. Vuelve al Eco10 Las firmas de inversión confían en este crecimiento, una muestra de ello es que Indra vuelve a ser un miembro del Eco10 (el índice de de inversión ideas de calidad creado por elEconomista). La compañía fue una de las integrantes con las que nació el índice y desde que lo abandonó en la revisión de diciembre de 2008 no había recuperado su plaza. M&G Valores, una de las firmas que ha apoyado la incorporación de Indra, indica que "es una firma de un sector de crecimiento que cotiza con un descuento muy importante frente a otras comparables en un momento en que debería producirse un punto de inflexión hacia una fase de crecimiento de sus beneficios". Algo que apoya Jaime Sémelas, de Capital at Work, "pensamos que la compañía va a recuperar la senda de crecimiento rentable que tenía en el pasado. Ello se debería reflejar en unos resultados trimestrales cada vez mejores y, por tanto, con potenciales subidas de estimaciones por parte del consenso de mercado". Un crecimiento que viene apoyado para algunas firmas de inversión por el cambio que se ha producido en la directiva de Indra -a finales de enero, Fernando Abril Martorell tomó las riendas-. "Nos parece que la llegada del nuevo consejero delegado va a desencadenar una revisión de negocios y estrategias (reestructuraciones) que probablemente redunden en una recuperación y normalización de los márgenes", explican desde Ábaco Capital. Un cambio que algunos expertos destacan de cara al negocio de Indra en el exterior. Un aspecto importante para la firma, ya que en 2013, más del 60 por ciento de sus ingresos tuvo sello internacional.