Cada vez hay más crudo, mientras el mercado cree que el consumo seguirá ralentizándoseLa primera semana de octubre está siendo muy dura para el precio de los dos principales referencias para el precio del petróleo en el mundo: ambas ceden más de un 5 por ciento desde el lunes. A pesar de que los descensos se suavizaron con el paso de las horas, durante la jornada los dos barriles llegaron a marcar nuevos mínimos de los últimos 27 meses en el caso del Brent, y de 17 meses para el West Texas estadounidense. Y es que el crudo tiene demasiados obstáculos para subir. El primero y más importante se encuentra en la buena salud que mantiene la producción de la materia. En 2014 Estados Unidos ha logrado colgarse el galardón del mayor productor del mundo, y la Agencia de Información Energética estima que en 2015 la producción del gigante norteamericano alcanzará el nivel más elevado desde 1971 -en septiembre la producción ya batió récords desde 1986-. Mientras tanto, las estimaciones que lanza esta misma organización para el futuro del consumo de petróleo apuntan a una ralentización: será menor de lo que se previó -ahora consideran que alcanzará los 93,8 millones de barriles al día, 300.000 menos de los que se preveían- debido a un posible frenazo de la recuperación económica. Ya en 2014 se está notando el descenso de la demanda, que durante el segundo trimestre del año retrocedió hasta los mínimos de 2011. El precio del barril Brent está siendo arrastrado por causas similares: los países de la OPEC cada vez producen más, liderados por Libia -el mayor productor de África- cuyas exportaciones se incrementaron durante el mes de septiembre hasta el nivel más elevado en más de un año. Ahora, según fuentes de Bloomberg, los países miembros de la OPEC podrían reducir su producción diaria para tratar de impulsar el precio del barril Brent, cuyo diferencial con el precio del WTI se estrechó ayer hasta el nivel más ajustado desde agosto de 2013.