La firma cedió un 5,5% en bolsa tras cerrar el aumento de 236 millones a 9,3 eurosCon la intención de ganar tamaño para poder involucrarse en proyectos de mayor envergadura, Gamesa cerró ayer una ampliación de capital acelerada (en 24 horas) por valor de 236 millones de euros, es decir, de un 9,9 por ciento de su capital. Lo hizo a un precio de 9,3 euros, lo que supuso un descuento del 4,6 por ciento respecto al precio en mercado y eso provocó que el valor se ajustase a la baja en bolsa (fue la compañía más bajista del Ibex, con un descenso del 5,5 por ciento, hasta los 9,22 euros). La ampliación, dirigida sólo a inversores cualificados y a la que Iberdrola ha acudido, llega en un momento muy goloso para la compañía. Si se cumplen las previsiones de los analistas, la mejor carta de presentación de Gamesa es la del crecimiento en beneficios. Un salto que le permitirá (también según expectativas de las firmas de inversión) recuperar el dividendo después de haberlo abandonado en 2013. Se prevé que el año que viene retome esa práctica con el reparto de 3 céntimos por acción con cargo a los beneficios de este ejercicio. Pero, con las ganancias que se esperan para el fabricante de aerogeneradores (de 107 millones de euros este año), esa retribución supondría desembolsar solo 7,12 millones de euros, un 6,6 por ciento de los beneficios que se prevé que genere. Incluso tras la ampliación de capital, por la que saldrán al mercado 25,3 millones de acciones, el desembolso que tendría que hacer Gamesa supondría solo 7,8 millones de euros, poco más del 7 por ciento. El cuádruple en tres años A los 107 millones de euros que se espera que gane este año la compañía (el doble que el año pasado), se une la expectativa de que en 2016 sus ganancias rocen muy de cerca los 200 millones de euros, es decir, en sólo tres años la compañía pasaría a multiplicar por cuatro lo obtenido en 2013.