Desde el pasado 23 de mayo, cuando el Nikkei cedió más de un 7 por ciento, el índice japonés se ha dejado un 13 por ciento en bolsa, donde está incluida la caída del 5,13 por ciento que vivió en la sesión de ayer. Sin embargo, por ahora la operativa abierta en el índice nipón no corre ningún peligro. Se encuentra muy alejado de su nivel de stop y todavía nos ofrece unas ganancias del 85 por ciento. Y es que, tal y como afirma Joan Cabrero, "lo mejor ahora es mantener posiciones ya que aceptamos que se trata de una fase de reacción a las subidas de los últimos meses que podrían llevar al Nikkei hasta los 13.000 enteros". Y para aprovecharlo, se pueden encontrar más de 50 firmas dentro del selectivo de referencia nipón que lucen un cartel de compra, entre quienes destacan Hitachi, Toyota o Mitsubishi. No obstante, no hay que olvidar el peso que tiene la guerra de divisas en este mercado. El yen ha vivido en los últimas semanas importantes alzas frente a sus cruces más negociados, sin embargo, afirma Joan Cabrero, "como en el caso del Nikkei, estas alzas parecen ser solo una fase de reacción, ya que la tendencia de fondo sigue planteando un yen bajista".