La Reserva Federal (Fed), el banco central de Estados Unidos, publicó ayer las actas correspondientes a su última reunión de política monetaria, que tuvo lugar los días 12 y 13 de septiembre, en la que puso en marcha una tercera ronda de estímulos cuantitativos (QE3). A juicio de lo que recogen las actas, podría haber más medidas en el futuro. "Si las perspectivas sobre el mercado laboral no mejoran sustancialmente, la Fed podría continuar sus compras de deuda hipotecaria, emprender la adquisición de otros activos y usar otros instrumentos como lo considere adecuado hasta que tal mejoría se produzca en un contexto de estabilidad de precios", expone la entidad presidida por Ben Bernanke en esos documentos. Acerca de los riesgos que la entidad estadounidense está asumiendo con su actual política monetaria, las actas reflejan que los miembros de la Fed consideran que "los potenciales peligros asociados con esas adquisiciones son manejables". Al mismo tiempo, la institución matiza que su compromiso de mantener los tipos de interés en el nivel actual, situado entre el 0 y el 0,25 por ciento, hasta 2015 no implica que la economía no vaya a recuperarse antes. "La Fed tiene la intención de apoyar una recuperación económica más fuerte", justifica para respaldar esa decisión. Sin prisas en Reino Unido Ayer también celebró su reunión de política monetaria el Banco de Inglaterra. Mantuvo los tipos de interés en el 0,5 por ciento y tampoco modificó el volumen de su programa de compras de deuda en el mercado, que permanece en los 375.000 millones de libras.