A pesar del "rescate" a la banca, los mercados de deuda parecen no querer dar un respiro al bono, llegando a tocar rentabilidades del 7 por ciento y elevándose el diferencial hasta los 545 puntos básicos, niveles históricos desde la creación del euro. Signos más que evidentes de que no se han disipado las dudas sobre la viabilidad del sistema bancario español y la estabilidad europea, ya que todavía no se conoce el importe que necesitará nuestro sistema financiero para ser saneado y el baile de cifras sigue presente.