En Europa toda la atención gira alrededor de las cuentas públicas de los Estados periféricos. Esta semana tuvimos doble ración, una por la parte de la deuda y otra por la del déficit. Por el déficit, Rajoy defendiendo ante Merkel su rigorismo anti-déficit para demostrar que es más alemán que los propios alemanes. Y por la deuda, nuevas exitosas emisiones por parte del Tesoro español e italiano, tanto en colocación como en tipos de letras a 3 y 6 meses (2.500 millones de euros al 1,735 por ciento y al 2,435 por ciento) y bonos a dos años (4.500 millones al 3,76 por ciento).