Es el partido más importante de Sogecable y la compañía ha logrado poner en un aprieto a los jugadores de Mediapro, su mayor rival en la guerra de los derechos del fútbol. Ayer un juzgado de Madrid prohibió a la productora y accionista de referencia de La Sexta emitir en esta temporada más partidos que los que contempla el acuerdo que alcanzó en julio de 2006 con Audiovisual Sport, -dueña de los derechos de emisión televisiva del fútbol, de la que Sogecable controla el 80 por ciento-.Así, Mediapro sólo podrá emitir un partido por jornada -el que sea considerado de "interés general"-. Gracias a ello, ayer Sogecable recibió la ovación de la grada de los inversores, y se disparó un 6,75 por ciento, hasta acabar en los 26,90 euros. Sin embargo, la filial audiovisual del Grupo Prisa no puede relajarse, porque aún le queda por jugar la segunda mitad del encuentro. Y todo apunta a que va a ser muy dura.Sogecable no las tiene todas consigo ya que, de todos modos, Mediapro ya ha llegado a un acuerdo con todos los equipos de segunda división y la gran mayoría de primera división -Real Madrid y Barcelona incluídos- para retransmitir sus partidos a partir de 2009.Tampoco ayuda que muchos clubes hayan amenazado con rescindir sus contratos con Sogecable, ante sus supuestos impagos. Fuentes cercanas a los clubes de fútbol aseguraron el lunes en declaraciones a elEconomista que desde Audiovisual Sport "han alegado problemas de liquidez" y que "si no pagan, la única opción será la rescisión unilateral de los acuerdos". A esto se unen los desacuerdos de la filial de Prisa con la televisión autonómica catalana TV3, dueña del otro 20 por ciento de Audiovisual Sport, por lo que los problemas de Sogecable aún no han desaparecido.