A partir de ayer, el parqué podría haberse vuelto menos resbaladizo para la distribuidora de la red gasista española. Después de perder más de un 5 por ciento en lo que iba de 2007, ayer el título de Enagás invirtió claramente la tendencia y cogió carrerilla, muy a pesar de un entorno bursátil francamente bajista. La gasista acabó el día en 17,13 euros, un 2,70 por ciento más que en la víspera. El motor de esta subida fue Merrill Lynch que, elevó su recomendación para Enagás a comprar desde neutral y mantuvo su precio objetivo de 20,7 euros, un 17,25 por ciento por encima del cierre de ayer. El precio justo de consenso entre los expertos, recogido por FactSet, se sitúa en 19,55 euros. Y es que los expertos de Merril no son los únicos analistas en haberse ocupado de Enagás. Las agencias de calificación crediticia Standard & Poor's y Moody's también se fijaron en Enagás este verano. Lo hicieron para confirmar sus ratings tras la presentación de su nuevo plan estratégico para el periodo 2007-2012, informó el 27 de julio la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Standard & Poor's mantuvo la calificación de 'AA-' a largo plazo, y 'A-1+', a corto plazo, mientras que Moody's confirma el 'rating' de 'A2' a largo plazo y 'P-1' a corto plazo. Ambas agencias otorgan, a su vez, una perspectiva estable a estos niveles.Menos optimistas fueron las previsiones de Merrill Lynch para Red Eléctrica Española (REE). Los analistas de la firma estadounidense rebajaron el precio objetivo de la gestora en algo más de un euro, desde los 42,5 hasta los 41,3. Sin embargo, incluso descontando esta rebaja, REE sigue siendo un valor atractivo, al cerrar ayer en 32,78 euros. Su precio objetivo de consenso, recogido por FactSet, se sitúa en 40,78 euros.