El supervisor exige casi a diario a estas entidades información detallada sobre sus fondosAlarma por el desconocimiento de la exposición a activos creados a partir de 'hipotecas basura'madrid. La reconocida eficacia de la banca española y su, en principio, baja exposición a la crisis provocada por las hipotecas de alto riesgo estadounidenses -también llamadas basura o subprime- hace que las consecuencias negativas para ella sean relativamente asumibles. Por supuesto, en la comparación con los sectores financiero de otros países, esta tesis queda tremendamente reforzada.Pero, detrás los más insignes protagonistas de la industria bancaria nacional, existe un ámbito -quizá menos conocido para el gran público, aunque en él están implicados numerosos inversores españoles- que a día de hoy está especialmente en riesgo frente a la tormenta que está cayendo: la banca de inversión. Por ello, el supervisor que lidera Miguel Ángel Fernández Ordóñez está tratándolo de manera especial. Según ha podido saber este periódico, el Banco de España está requiriendo a estas entidades de inversión información exhaustiva prácticamente a diario sobre el nivel de exposición que mantienen respecto al virus crediticio venido de EEUU. La razón de este estrechamiento del cerco sobre la banca de inversión no es muy diferente de los motivos que llevan al Banco de España a mantenerse vigilante con el resto de la banca, pero sí la intensidad con que se produce el fenómeno. Es decir, el argumento general para que el supervisor se mantenga alerta es el desconocimiento sobre el alcance del virus -ni las propias entidades aún lo conocen- y resulta válido para todos los actores financieros. Aunque, en el caso concreto de la banca de inversión este control se incrementa precisamente porque el Banco de España sabe menos todavía de la posible afectación que sufren.A pesar de que entre los principales representantes de este subsector apenas se encuentran bancos nacionales -ni Santander Investment ni la filial inversora de BBVA ocupan alguno de los primeros del ranking- sí hay miles de españoles que operan con entidades, o con los fondos que dependen de ellas, como JP Morgan, Citigroup, BNP Paribas, Merryll Lynch o Goldman Sachs, entre otras, y de ahí la preocupación de Miguel Ángel Fernández Ordóñez.¿Por qué la banca de inversión?A muchas personas les resultará complicado entender cómo el hecho de que un grupo de personas, por muy numeroso que sea, deje de tener posibilidades para pagar sus hipotecas en EEUU acabe repercutiendo sobre la banca española y, más específicamente, sobre la de inversión. La respuesta es clara: existen miles de fondos, en los que como se ha demostrado con esta crisis, había invertido medio mundo, que están parcialmente confeccionados con activos que tienen su base en las denominadas hipotecas subprime o de alto riesgo.Tan es así, que son estas herramientas financieras, con los miles de millones que inversores de todo el planeta han depositado en ellas, las que han provocado la enorme crisis global que se ha desatado y no el hecho per se de que unos miles de estadounidenses hayan dejado de hacer frente a sus hipotecas. Ésta es la clave.Yendo un poco más allá, los fondos más problemáticos son los derivados y los monetarios dinámicos -que invierten en acciones de renta fija, a corto plazo y suelen obtener beneficios más elevados de lo habitual-, ya que suelen llevar una fuerte carga de activos subprime.Con todo, por su singular naturaleza inversora, al manejar este tipo de banca, que tanto preocupa a Fernández Ordóñez, estos fondos con mayor asiduidad que el resto, se encuentra en la actualidad más expuesta a los devastadores efectos de las hipotecas de alto riesgo.Finalmente, cabe recordar que, en primer lugar, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) también ha solicitado a la banca que haga públicos con nombre y apellidos los productos que tienen invertidos en fondos extranjeros que, de una u otra manera, estén afectados por la crisis de las hipotecas de alto riesgo. Y, además, la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones también ha pedido a las gestoras y aseguradoras que comuniquen los productos con inversiones en activos relacionados con los créditos hipotecarios norteamericanos de alto riesgo.