El selectivo español pierde un 15% desde enero, once puntos más que el índice de la zona euroSólo en los años 2000 y 2005 el EuroStoxx 50 se ha comportado mejor que el índice hispanomadrid. La bolsa española consiguió cerrar la sesión en positivo a pesar de que el sistema financiero volvió a recibir un nuevo palo. En esta ocasión fue la agencia de calificación Moody's quien hizo que las ganancias del selectivo se redujeran a tan sólo un 0,29 por ciento en la jornada, hasta situar al indicador en los 10.151 puntos. Un balance que encamina al Ibex 35 a cerrar el año con la mayor diferencia de rentabilidad con respecto a la zona euro de la última década. Durante la sesión, el selectivo español intentó hacer oídos sordos de las noticias que cuestionaban, una vez más, la salud de nuestros bancos. Pero no lo consiguió del todo. Después de que Moody's reiterara que las perspectivas sobre el sistema financiero español siguen siendo "negativas" principalmente por "las difíciles condiciones económicas del país, el continuo deterioro de la calidad de los activos y los planes de austeridad fiscal del Gobierno español", las subidas con las que celebraba el mercado el mantenimiento de los tipos de interés en China tras publicar un dato de inflación muy elevado no pudieron ser tan abultadas. El Ibex salvó la jornada en positivo, aunque llegó a moverse en los 10.219. El sector bancario penalizó de nuevo a la bolsa española. Salvo Santander, todas las entidades cerraron en negativo, aunque con pérdidas que no se acercaron al 1 por ciento. Los inversores celebraron en el parqué que la participación de Iberdola en Gamesa ya asciende al 17,4 por ciento, lo que llevó a la renovable a ser el mejor valor con un alza próximo al 4 por ciento. OHL y ArcelorMittal también repuntaron más de un 3 por ciento. Mal balance Las previsiones que hacían los analistas para este año distan mucho de lo que finalmente parece que va a ocurrir. Mientras que algunas firmas de inversión pronosticaban para este ejercicio que el cierre del Ibex 35 podía superar los 14.000 puntos, la realidad es que a no ser que ocurra un milagro en las próximas dos semanas el balance de la bolsa española puede ser desolador. Por el momento, el selectivo español pierde en el año cerca de un 15 por ciento por un 3,7 por ciento que se deja el EuroStoxx 50 en el mismo periodo. Una tendencia que de mantenerse podría llevar a la bolsa española a cerrar el año con la mayor diferencia de rentabilidad desde 2000. El peso importante que tiene el sector bancario en el indicador y las dudas que existen sobre la solvencia de España y los rumores de que tenga que recurrir al Fondo de rescate de la Unión Europea han penalizado su evolución. Así, aunque desde comienzos de diciembre sume 800 puntos, el balance de este año puede poner punto final a cuatro años consecutivos en los que la rentabilidad del Ibex superaba a la del índice de la eurozona. En la última década, la evolución del Ibex con respecto a la zona euro ha sido mejor en ocho ocasiones. Principalmente en 2006, cuando la diferencia de rentabilidad superó los 16 puntos básicos en parte por la marcha brillante de valores como Sacyr y Abengoa. Sin embargo, los años negros del Ibex fueron 2000 y 2005. El EuroStoxx sorteó mejor que la bolsa española el pinchazo de la burbuja tecnológica. Así, mientras que el Ibex perdió en 2000 casi un 22 por ciento por el impacto que tuvo en algunas de las grandes compañías españolas, el EuroStoxx salvó la situación con una caída del 2,6 por ciento, lo que supone una diferencia de 19 puntos básicos.