Las actas de la última reunión confirman las dudas existentes en el banco central de EEUUMADRID. Un banquero central no sólo de debe saber de economía y política monetaria. Entre sus variadas artes también debe figurar la diplomacia. Es decir, la necesidad de negociar para labrar consensos y sacar adelante decisiones. Así debió hacerlo Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal (Fed), durante la reunión que el banco central de EEUU mantuvo el pasado 10 de agosto. Las actas de esta cita, publicadas ayer, revelaron que la disensión existente en el seno de la institución a la hora de reforzar su política monetaria con más medidas cuantitativas. En concreto, la Fed acordó en esa reunión retomar las compras de deuda pública, una estrategia que llevará a cabo mediante la reinversión del dinero procedente de los vencimientos de deuda hipotecaria y de agencias como Fannie Mae y Freddie Mac que tiene en su balance. En este sentido, "unos pocos" participantes advirtieron del riesgo que implicaba reinvertir los vencimientos de deuda hipotecaria en deuda pública, porque "podría lanzar una inapropiada señal de que el Comité está preparado para retomar las compras de activos a gran escala". Y "otro" miembro recordó que esa decisión "complicará la eventual salida" de las condiciones monetarias actuales y "podría tener consecuencias macroeconómicas adversas en los años futuros". Estas dudas se trasladaron a los mercados de Wall Street, hasta el punto que los índices norteamericanos se despidieron de las ganancias y terminaron cerrando planos, aunque manteniendo sus soportes. Además, la Fed descartó volver a comprar deuda hipotecaria... por el momento. "Si las condiciones cambian, reinvertir en títulos hipotecarios sería deseable", revelan las actas. Ese empeoramiento podría venir de la mano de los precios, pese a que los miembros de la Fed entienden que "el riesgo de deflación es muy pequeño". Lo que sí reconocen es que "el riesgo de una mayor desinflación había crecido", un escenario que encaja con su visión de que tanto la recuperación económica como el mercado de trabajo "se ha debilitado".