madrid. Tras el primer trimestre del año, BlackRock Merrill Lynch sigue manteniendo sus previsiones de principios de 2007, con una desaceleración del crecimiento económico y de los beneficios y una volatilidad al alza. Su vicepresidente y director global de Inversiones de Renta Variable, Bob Doll, vuelve a marcar el decálogo de lo que será el resto del año. Primero: la economía estadounidense se desacelerará hasta el 2-2,5 por ciento, mientras que el crecimiento fuera de EEUU sigue siendo relativamente sólido. En segundo lugar, Doll augura un crecimiento de los beneficios en EEUU inferior al previsto; y en tercero, una bajada de los tipos, tras un crecimiento razonablemente lento y una inflación moderada. En cuarto lugar, los beneficios que se pagarán por las compañías serán más razonables. Y en quinto, los valores de gran capitalización terminarán imponiéndose. En el sexto puesto, Doll augura que los sectores de energía, salud y tecnologías de la información batirán a las utilities, telecos y consumo básico. Mientras que en el séptimo lugar presagia la debilidad del dólar, hasta su nivel más bajo de la última década. Además, cree que Japón será el único país importante con mayor crecimiento nominal, una alta volatilidad y un resurgimiento populistas en EEUU.