Ganó un 0,64% con Santander y BBVA como mejores aliadosmadrid. El Ibex 35 sigue decidido a hacer historia y lo demostró con creces durante la sesión de ayer. Así, se enfundó una vez más el equipo de escalada para subir un 0,64 por ciento y coronar por tercera vez en toda su vida bursátil los 14.500 puntos, cerrando en 14.507 puntos, y quedándose a tan sólo un 0,23 por ciento de sus máximos históricos marcados el pasado miércoles 24 de enero en 14.540,7 puntos. En esta ocasión, la remontada no llegó de la mano de Endesa o Telefónica, dos de los valores que más están apoyando al índice este año, sino que lo hizo sustentada en Santander y BBVA, que se revalorizaron un 1,2 y un 0,5 por ciento, respectivamente, ante sus próximos resultados -BBVA se examina ante el mercado mañana mientras que Santander lo hará el jueves-.Pero no solo de grandes entidades financieras vive el Ibex y, además de BBVA y Santander, colaboraron otras compañías como Iberia, con un avance de un 3,3 por ciento gracias a la mejora de precio objetivo de UBS y Merrill Lynch; o Inditex, que ganó un 2,7 por ciento aupada por un informe de UBS. Incluso Telefónica consiguió salvarse de las pérdidas que vivieron la mayoría de compañías de su sector tras la rebaja de previsiones de Deutsche Telekom (ver página 20), remontando un 0,24 por ciento. Por si fuera poco, la escalada del Ibex tiene si cabe más mérito viendo lo que hicieron los principales índices europeos. Tan sólo el Cac francés avanzó más que el índice español, un 0,67 por ciento. El resto se quedaron por debajo: el Dax subió un 0,53 por ciento; el Ftse inglés remontó un 0,19 por ciento; y el EuroStoxx 50 escaló un 0,43 por ciento. Además, el Ibex puede presumir de avanzar más que estos índices en el presente ejercicio, ya que acumula una revalorización del 2,55 por ciento en enero.En este contexto, el Ibex 35 afrontará hoy el reto de conquistar unos nuevos máximos históricos, para lo que en principio cuenta con la ayuda de la evolución del petróleo. En la jornada de ayer, el Brent, que es el crudo que se toma como referencia en Europa, cayó casi un 3 por ciento y volvió a situarse por debajo de los 54 dólares por barril.