El barril de 'Brent' llegó a caer por debajo de los 54 dólares, su cotización más baja en catorce mesesEl índice español, que durante la jornada superó incluso los 14.400 puntos, finalizó en los 14.311,5madrid. El Ibex 35 se las prometía muy felices ayer. Durante la primera mitad del día caminó con aparente holgura por encima de los 14.400 puntos. Nunca antes lo había hecho, por lo que la conquista de un nuevo récord parecía segura. Después de cuatro sesiones intentándolo, el índice de referencia de los mercados español lo tenía todo a favor para culminar su asalto a los máximos. Pero aún faltaba la última palabra. La pronunció el petróleo. Y no la dijo por decir, sino que fue la palabra que apartó al Ibex de su triunfal marcha. Al mediodía, la cotización del barril Brent, el crudo que se toma como referencia en Europa, retomó sus descensos. Si hasta ese momento se había mantenido tranquila en torno a los 55 dólares, después llegó a caer por debajo de los 54 dólares por vez primera desde noviembre de 2005. En concreto, marcó un mínimo de 53,6 dólares, que representaba un descenso diario superior al 3 por ciento. Giro bajistaAunque posteriormente moderó su descenso y llegó incluso a recuperar los 55 dólares por barril, esta reacción se produjo con los parqués ya cerrados, por lo que los índices se vieron sacudidos por esa debilidad anterior. Por paradójico que resulte, porque la fortaleza del crudo ha sido una de las mayores fuentes de inestabilidad para los mercados en los últimos años, su debilidad actual también genera pérdidas en los indicadores. Las petroleras tienen un peso muy importante dentro de ellos, por lo que los retrocesos de aquellas ejercen una alta influencia en la evolución de los índices. Esta realidad volvió a evidenciarse ayer. En conjunto, el sector fue el que peor se comportó en Europa, con un descenso medio del 1,6 por ciento. Por empresas concretas, las más damnificadas fueron la noruega Statoil y la inglesa British Petroleum (BP), con recortes superiores al 3 por ciento. La española Repsol figuró entre las más perjudicadas, afectada igualmente por la incertidumbre generada en Latinoamérica por las últimas medidas de Hugo Chávez en Venezuela -ver págs. 29-31-. Sus acciones bajaron un 1,85 por ciento, hasta los 25,47 euros. La francesa Total también perdió más de un 1 por ciento. En el mejor de los casos, los retrocesos de las petroleras sólo moderaron los avances de los índices europeos. Así, el francés Cac 40, en el que Total tiene un peso del 12,5 por ciento, se contentó con avanzar un 0,26 por ciento después de que por la mañana llegó a repuntar cerca de un 1 por ciento. En el británico Footsie 100, en el que BP representa el 7 por ciento, las ganancias próximas al 0,5 por ciento se redujeron hasta un leve 0,03 por ciento. Esta vez el peor de los casos correspondió al Ibex. La influencia de Repsol, que tiene un peso del 6 por ciento en el índice, resultó determinante para que el indicador español mutara los avances matinales por los números rojos vespertinos. No en vano, la petrolera restó 16 puntos al índice, que al final cayó un 0,08 por ciento, para cerrar en los 14.311,5 puntos. Demasiadas dudasEl descenso del crudo, además de responder a las elevadas temperaturas que se están registrando durante el invierno y al incremento de los inventarios, está alimentando todo tipo de especulaciones. Unos aluden a la posibilidad de que esté anticipando una menor demanda mundial de petróleo, que pondría sobre la pista de una desaceleración económica superior a la prevista. Otros aluden a que los famosos hedge funds -fondos de inversión libre- están liquidando posiciones. Como concluye José Luis Martínez, estratega en España de Citigroup, "sí, sigue siendo un mercado especulativo, pero ahora la especulación favorece la caída de los precios".