Las dos compañías están siendo las grandes beneficiadas con el recrudecimiento de la crisis sanitariaEstas dos semanas han estado marcadas por el coronavirus y su dañino efecto en las principales empresas del mundo. Las compañías han sufrido enormes tijerazos en sus previsiones de beneficio neto, descalabros en bolsas, que recordaban a los del Brexit, y augurios no muy halagüeños. Pero, en todas las crisis siempre hay algunas empresas que se benefician de la situación. Este es el caso de la norteamericana First Solar y de la francesa Orange. A la primera, la propagación de esta enfermedad le ha supuesto una gran ventaja competitiva contra uno de sus grandes rivales, China. Por su lado, el grupo galo ha visto cómo los expertos han mejorado las estimaciones de sus ganancias netas para este 2020.First Solar no "se apaga"Durante varios años, First Solar ha tenido en frente a la segunda potencia del mundo invirtiendo en energía solar a lo largo de todo el mundo. Sus paneles de dos caras se habían convertido en una gran amenaza para la compañía norteamericana. Uno de los mercados donde China había hecho una mayor inversión fue Irán. En la ciudad de Qom impulsó la creación de una de estas instalaciones, que ha acabado siendo uno de los mayores focos de la propagación del virus. La infección ha conseguido que la economía de los dos países asiáticos se resientan y que los sectores, como el de la energía, decaigan tanto en producción como en ventas.Esta situación le ha dado una gran ventaja a First Solar y se ha visto reflejada en sus ganancias netas para este 2020 que se estiman en 329 millones de euros. Se trata de un gran resultado, que contrastan con los ejercicios de 2019, 2017 y 2016, donde cerró con perdidas. Los analistas no han pasado por alto este crecimiento y la mayoría de ellos recomiendan comprar las acciones de la compañía.Las nuevas plantas que ha abierto en Vietnam son las culpables de este aumento del beneficio. Los expertos de Bloomberg Intelligence recomiendan que no se alejen de esta buena senda y que diversifiquen su oferta. Destacan sus paneles de la serie 6, "que les pueden ayudar a conseguir una mayor rentabilidad y a contrarrestar los bajos precios de los paneles de silicona de los competidores".De hecho, la industria de la energía solar se encuentra en un momento dulce. Los analistas de JP Morgan coinciden en que el boom actual de este sector va a durar, debido a "la paridad de los precios de estas energías con las más tradicionales, a una mayor eficiencia de los mecanismos en la bolsa y a una mayor racionalidad en el comportamiento de los operadores del mercado". Además, afirman que "están rozando precios muy competitivos y que se están abriendo un gran número de oportunidades para este sector en la industria digital y en el de las utilities". Por su parte, Orange se está librando de los recortes de previsiones en su beneficio neto, algo que están sufriendo la mayoría de compañías europeas. Los expertos se las han subido un 1%, desde el 19 de febrero (día en el que se recrudeció la crisis), mientras que a la mayoría de las empresas mundiales han tenido que ver cómo se reconfiguraban las suyas a la baja. En total, los analistas han elevado sus beneficios en un 3% desde que comenzó el año y se estima que la multinacional acabe este año con unas ganancias netas de 2.764 millones de euros. De conseguir alcanzar esta cifra, sería una gran alegría para la compañía, ya que significaría su mejor resultado desde 2011, cuando obtuvo un total de 3.895 millones de euros.En consecuencia, la mayor parte de los expertos sigue confiando en sus acciones y les dan un potencial de más de un 25% de cara a los siguientes 12 meses, por ello, la mayoría de ellos, un 53%, recomienda adquirir los títulos del grupo. Los analistas siempre han considerado a Orange como un valor refugio dentro de su industria, debido a la positiva conducta de su negocio en suelo francés y al fuerte empuje que le viene de su matriz española, que es su segundo mercado más importante, según los datos recogidos desde FactSet y supone el 12,4% de sus ventas totales. En bolsa no ha sido capaz de resistir el envite del Covid-19 que la ha hecho caer cerca de un 5% en el parqué francés desde que comenzó el año aunque, actualmente, se está recuperando, ya que llegó a derrumbarse más de un 10%, situándose en niveles de 2013. De todos modos, su caída en el mercado de valores es bastante pequeña si las comparamos con los índices en los que cotiza, el CAC 40 francés está cayendo un 9% en el mercado de valores desde que empezó 2020, los números rojos en el EuroStoxx 50 superan el 10%, y el Stoxx 600 cede más de un 8%. De hecho, el sector de las telecomunicaciones es una de las industrias que mejor está resistiendo toda esta crisis.