El pasado viernes, tras varias sesiones titubeando sobre niveles clave, el euro perdía uno de los soportes más importantes que ha tenido en las últimas semanas, el de los 1,098 dólares –este jueves tocó los 1,083–. El muro que separaba un contexto potencialmente alcista de uno bajista era derribado y obligaba a los inversores a mirar, en palabras de Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, "a los mínimos del año pasado e incluso la zona de soporte y de giro potencial de los 1,08 dólares por euro"."Una vuelta hacia los 1,035 dólares ganaría muchos enteros si la cotización del par pierde la zona de los 1,08 dólares, que es el siguiente soporte al que se enfrenta el par", asegura Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. La vorágine bajista en la que se ha visto envuelto el euro/dólar desde el primero de enero, fecha desde la que el par se deja más de un 3,3%, incita a buscar una solución al efecto divisa para aquellos inversores que tengan en su cartera empresas norteamericanas en dólares, y que ya hayan sentido el incremento de sus rentabilidades gracias a la depreciación del dólar.Si este escenario técnico se materializara, sería ahí un momento idóneo para cubrir la cartera ante una probable caída del dólar, que podría hacer desaparecer hasta un 7,5% de rentabilidad en dichas operativas si se diera un retorno a los 1,12 dólares. Eso sí, cuando se haga se debe medir si la pérdida máxima por el impacto del tipo de cambio es tolerable y si compensa realizar este tipo de operativa. No en vano, el coste de cubrirse de una apreciación de euro frente al dólar está en el 2,18% según recoge Bloomberg, su nivel más bajo desde finales de 2017."La debilidad de los datos económicos de la Eurozona, unido a la incertidumbre del coronavirus y las crecientes tensiones en las negociaciones post Brexit, condicionan un menor apetito relativo por los activos europeos", explican desde Monex Europe, desde donde alertan de la "nueva señal de incertidumbre política que asoma ahora desde Alemania, tras la renuncia de la candidata Kramp-Karrenbauer como sustituta de Ángela Merkel". "Desde los 1,088 dólares por euro, podría intentar formar un rebote, pero a priori lo vemos vulnerable y no descartamos asistir luego a más caídas", señala Cabrero. Desde Afex y Barclays son más pesimistas, incluso, con el euro y en sus últimos análisis realizados en febrero, ven al par cotizando por debajo de los 1,08 enteros a final de año. Una visión que, sin embargo, contrasta con la que mantienen de media los analistas recogidos desde Bloomberg, que ven al euro/dólar revalorizándose por encima de los niveles en los que comenzó el ejercicio en los próximos meses. En este sentido y ante los posibles giros en materia de política monetaria que Christine Lagarde pueda llevar a cabo en los próximos meses a raíz del potencial impacto económico del coronavirus, las empresas europeas con mayores ingresos fuera de la zona euro, son las que ven esta caída del euro como una baza que les permita enfatizar sus ingresos por ventas.