Desde que empezó el mes, la deuda con sello europeo ha sido uno de los activos que los inversores han descartado en el mercado de renta fija. La distensión que se ha producido en los mercados, con el acercamiento de posturas entre Estados Unidos y China, y lo que parecen los primeros pasos de un fracaso del primer ministro británico, Boris Johnson, de llevar al Reino Unido a un Brexit sin acuerdo, los inversores se han lanzado a comprar bolsa, y han olvidado la deuda, de forma general. Sin embargo, dentro de las ventas generalizadas que se están produciendo en la renta fija (de las 20 principales categorías que recoge Bloomberg, solo seis evitan las pérdidas en septiembre), la deuda europea está sufriendo especialmente, con una caída de casi el 0,4 por ciento en el agregado de deuda europea que recoge la agencia, sólo por detrás de las pérdidas que acumula el agregado de deuda canadiense, que superan el 0,6 por ciento en el mes. Francia y Alemania son los dos países a los que más les ha incrementado la rentabilidad de los bonos en septiembre, en 12 y 11,7 puntos básicos, respectivamente.Los mercados parecen estar descartando la deuda europea, incluso teniendo a pocos días vista la reunión del Banco Central Europeo (BCE), en la que es posible que el organismo lance un nuevo programa de compras de bonos.Sin embargo, parece que las ex-pectativas de rentabilidad que se manejan para el conjunto de bonos europeos está echando para atrás a los mercados: la expectativa que recoge la agencia para la deuda europea es del -0,08 por ciento para el próximo año, la única entre las 20 principales categorías de renta fija que está en terreno negativo.