Bolsa, mercados y cotizaciones

Los ETFs, la nueva amenaza para Wall Street

  • Un informe acusa a la proliferación de fondos cotizados de distorsionar el mercado


Los ETFs, fondos cotizados que replican índices y que han alcanzado un enorme desarrollo en los últimos años con múltiples variantes (apalancados, inversos, apalancados inversos, sectoriales, basados en los dividendos, concentrados, amplios...).

Y eso precisamente puede convertirlos en el peor enemigo del mercado por las distorsiones que están creando en él.

Se trata de un debate que está haciendo mucho ruido en EEUU, aunque eclipsado estos días por el G20, y que tiene una realidad muy importante detrás. Además, nos interesa mucho porque los usamos habitualmente en nuestras estrategias.

Esta semana, la Fundación Kauffman ha provocado una tormenta con un estudio en el que echa la culpa a los ETFs de los flash crash (fuertes caídas en períodos de tiempo muy cortos), de la falta de OPVs y de otros muchos problemas del mercado.

Joshua Brown, asesor financiero y columnista de CNBC.com, considera que los ETFs son increíbles por su eficiencia y sus costes internos, pero admite que hay ineficiencias y costes externos que hay que reconocer. Por ejemplo, considera incontestable que han contribuido a la altísima correlación que existe ahora entre los valores individuales y los índices, y han convertido a las acciones en materias primas, lo que ha alterado completamente la dinámica de la inversión. La consecuencia ha sido la huida de los inversores particulares de las acciones individuales.

Pese a ello, Brown considera que los ETF son la mayor innovación financiera de la historia para gestionar el dinero de forma profesional. En los 90, cuando uno quería tomar posiciones en petroleras, debía tomar posiciones de diferentes tamaños en distintos valores del grupo, con cálculos de ponderaciones muy complejos, para replicar al sector. Ahora, esa operativa sólo supone un click. E incluso hacer cosas mucho más sofisticadas, como ponerse largo en valores de empresas de gas natural y corto en futuros sobre el Brent, con dos clicks. Los ETF permiten entrar y salir en cualquier momento de cualquier estilo, sector o clase de activo que se pueda imaginar.

El problema es que han tenido tanto éxito y se han diversificado tanto que ahora tenemos ETFs que rozan el absurdo. Cada mes salen nuevas versiones de fondos que ya existen, pero sus ventajas, a juicio de Brown, el precio que hay que pagar por su comodidad y su liquidez es este subibaja del mercado. Pero parece imparable, con casi un billón de dólares invertidos actualmente en estos productos.