M. Continuo

EXCLUSIVA-La OEA elogia cambios en Cuba, pero su vuelta queda en el aire



    LA HABANA (Reuters) - El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, aplaudió el martes los cambios económicos que impulsa Cuba y dijo que su inédita presencia en la isla es un gesto de aproximación con el organismo del que fue expulsada hace más de medio siglo.

    Sin embargo, en una entrevista con Reuters, Insulza dijo que no esperaba discutir la eventual reincorporación total de Cuba a la Organización de Estados Americanos (OEA) durante una cumbre latinoamericana en La Habana.

    Invitado por cortesía diplomática por el gobierno de Raúl Castro, Insulza se convirtió en el primer funcionario de la OEA en pisar suelo cubano después de que la isla fuera expulsada en 1962 por presiones de su viejo enemigo, Estados Unidos.

    Cuba atraviesa por un momento de cambios, con Castro intentando relajar el control del Estado sobre la economía, permitir pequeños negocios privados y suavizar restricciones como la de viajar al extranjero.

    "El cambio en la dirección de una mayor apertura siempre lo veo como positivo", dijo Insulza, aclarando que no era su tarea hablar sobre el rumbo y el ritmo de los cambios. "Le deseamos a su Gobierno mucha suerte y ojalá que las transformaciones económicas que se están llevando a cabo también den lugar a transformaciones políticas que también se requieren".

    La OEA ha sido criticada en la región por la influencia que Washington ha tenido en el mecanismo hemisférico. La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) reunida esta semana en La Habana fue creada hace tres años como una suerte de contrapeso.

    Los roces entre Cuba y la OEA comenzaron después de la revolución liderada por el expresidente Fidel Castro en 1959. Algunos años más tarde fue expulsada del organismo a solicitud de Estados Unidos por sus asignaturas pendientes en derechos humanos.

    A petición unánime de los países latinoamericanos y caribeños, la OEA levantó la restricción sobre Cuba en 2009.

    "Es un esfuerzo grande que hemos hecho por romper barreras, por permitir que los temas de la región se resuelvan por medio del diálogo y estoy muy contento de que mi presencia acá se le de un significado en ese sentido de una aproximación", dijo.

    RETÓRICA ENCENDIDA

    Cuba ha dicho que no regresará a la OEA, un organismo al que calificó de "títere" de Washington, pero naciones de la región siguen buscando su incorporación total al sistema interamericano.

    Insulza aseguró que intentará reunirse con Raúl Castro, pero que no tiene previsto discutir el tema de la reincorporación ni la intención de convencer a su gobierno de volver al organismo durante su visita.

    "No vamos a resolver acá el tema de la pertenencia o no de Cuba a la OEA y ese tipo de cosas, pero es bueno estar en una reunión como esta", agregó.

    Poco antes de la llegada de Insulza, el canciller cubano Bruno Rodríguez volvió a dejar clara la posición del país.

    "No regresaremos a ella (la OEA). Tiene una carga histórica negativa como instrumento de dominación de los Estados Unidos que no puede resolver mediante ninguna reforma", aseguró.

    Pero Insulza, un académico chileno que tuvo que escapar de la dictadura de Augusto Pinochet y vivir durante años en el exilio, celebró su visita a Cuba y justificó la retórica cubana.

    "Después de decir todas las cosas que se han dicho de la OEA durante 55 años, no se va a cambiar el discurso tan de golpe a menos que haya un motivo para realizarlo", dijo.