El alto representante en Bosnia insta a no politizar las sentencias del TPIY
En un comunicado, el diplomático austríaco instó a las partes involucradas en las guerras de la antigua Yugoslavia a "seguir en el camino de la reconciliación".
La condena de seis líderes bosniocroatas hoy puede ser "un punto de inflexión" para Bosnia-Herzegovina, el país balcánico que sufrió la guerra más larga y sangrienta de todos los conflictos en la antigua Yugoslavia.
En ese conflicto se enfrentaron durante ciertos períodos al mismo tiempo los tres grupos étnicos de Bosnia, los serbios, croatas y musulmanes.
Las sentencias de hoy se refieren precisamente a crímenes cometidos contra civiles bosniomusulmanes por parte de unidades bosniocroatas.
Slobodan Praljak, el exgeneral bosniocroata que se suicidó hoy al ingerir veneno pocos segundos después de oír la confirmación de su condena a 20 años de cárcel, era además uno de los supuestos responsables de la destrucción del famoso puente histórico de Mostar, en el sur de Bosnia.
El primer ministro croata, Andrej Plenkovic, calificó hoy el suicido como una respuesta a la "injusticia moral" de la condena emitida contra Praljak, otros cinco bosniocroatas acusados y el pueblo croata en general.
Inzko destacó hoy a Alemania como un ejemplo a seguir para un análisis "honesto y fuerte" de su propia historia.
Eso ha favorecido el fuerte progreso de Alemania en las últimas décadas, lo que Bosnia solo logrará si respeta plenamente las condenas del Tribunal de la ONU, concluyó.
El alto representante internacional en Bosnia-Herzegovina es un cargo con poderes legislativos en el país balcánico, instaurado tras el final de la guerra en 1995.