Javier Tebas: "En La Liga no pasará lo de la Federación"
- La patronal del fútbol firma un convenio para potenciar la integridad
Pedro del Rosal
La Liga de Fútbol Profesional y Transparencia Internacional firmaron ayer un convenio para profundizar en la transparencia e integridad en su gestión y organización. Un acuerdo por el cual la patronal de los clubes de fútbol se compromete a dar publicidad "de manera clara y comprensible", entre otros extremos, a su organización institucional y administrativa; su gestión económica, contable y presupuestaria; sus convenios, contratos y subvenciones; sus cargos directivos y persona; y su modelo de cumplimiento -o compliance-.
La ONG, por su parte, se compromete a fiscalizar su cumplimiento y, en su caso, a ofrecer la colaboración necesaria para que se alcancen los objetivos indicados.
"Éste no es un protocolo más; se trata de un acuerdo estratégico porque no se limita a enunciar normas de transparencia y buena gobernanza, sino que da un paso más y se somete al control de un tercero independiente", aseveró el presidente de La Liga, Javier Tebas, que lamentó que "si en la Federación y en la FIFA hubieran tenido normas reconocidas y supervisadas, no habría pasado lo que ha pasado".
Tebas, que se mostró muy crítico con lo sucedido en la Federación Española de Fútbol (su todavía presidente, Ángel María Villar, se encuentra investigado en el marco de la Operación Soule por haber organizado una trama para su enriquecimiento personal aprovechando la actividad de la organización), se mostró esperanzado de que la determinación de La Liga a favor de la transparencia y el cumplimiento se extienda a otras organizaciones del mundo del deporte.
"El mayor riesgo en las instituciones deportivas es el clientelismo", advirtió. Y defendió que "un buen departamento de compliance" es clave para eliminar o reducir riesgos. "En La Liga no vamos a tener el disgusto de encontrarnos con que se ha utilizado mal el dinero de la televisión, como ha pasado en la Federación", manifestó.
Las circunstancias en las que opera La Liga, con 300 empleados, sedes en decenas de países y la gestión de unos derechos audiovisuales de 1.700 millones de euros, la convierten en una organización especialmente sensible a la corrupción. Sin embargo, las medidas adoptadas en los últimos años han servido para disminuir el número de escándalos y mejorar los resultados y la gestión económica de los clubes de fútbol.
Uno de los objetivos de Tebas es extender las medidas de gobernanza y transparencia a otros ámbitos del deporte. "En muchas federaciones, con 40 empleados, uno puede hacer un árbol genealógico, porque tiene al abuelo, al padre y al hijo. No digo que no sean buenos trabajadores, pero ¿tanto? ¿es que tienen un ADN especial?", ironizó.
Exigencias a los clubes
La patronal de los clubes se reconoce muy consciente de la mala reputación que arrastra el fútbol en los últimos años. Por ello, ha redoblado sus esfuerzos para introducir criterios de transparencia e integridad en su actuación. De hecho, el contar con un programa de compliance (o prevención de delitos) es uno de los requisitos de inscripción en la competición para los equipos de Primera y Segunda División.
Asimismo, el fútbol es el primer sector privado que acepta someterse a un examen de transparencia, el índice Infut, que evalúa a los 42 clubes que componen las dos primeras categorías de la competición.