Sindicato policial denuncia fallas en vigilancia en aeropuerto de Los Ángeles
Según la Asociación de Oficiales de Control de la Ley del Aeropuerto de Los Ángeles (LAAPOA, en inglés), el LAX, el tercer aeropuerto del país en volumen de pasajeros, sigue siendo vulnerable a ataques como el ocurrido el 1 de noviembre de 2013 y que costó la vida al agente de origen salvadoreño.
"Ningún otro aeropuerto en este país tiene una policía dividida con el modelo peligrosamente inconexo del LAX, de tener policía de los propietarios del aeropuerto innecesariamente complementada por la policía del LAPD (Departamento de Policía de Los Ángeles)", criticó el sindicato.
La denuncia destaca que un informe de 80 páginas solicitado por los responsables del LAX "cuestiona la respuesta descoordinada del LAPD tras el incidente, que se contrapuso con la policía del aeropuerto".
El oficial Hernández, de 39 años, el primer agente de la TSA muerto en servicio, murió en un ataque cometido por Paul Ciancia, de 23 años, en el Terminal 3 del LAX.
El sindicato reclama que, a pesar de que el aeropuerto se ha expandido físicamente, lo que ha supuesto un mayor volumen de pasajeros, "el número de oficiales juramentados del LAXPD (policía del aeropuerto) ha venido disminuyendo continuamente hasta llegar a su nivel más bajo desde 2008".
Por ello, el sindicato asegura que el LAX, por el que pasan 150.000 pasajeros al día, sigue siendo el "objetivo terrorista más importante de la costa oeste" y que "los vacíos de policía y seguridad que existen en el LAX son evidentes".