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Los ediles de Santiago condenados renunciaron por imperativo legal



    Santiago de Compostela, 3 jun (EFE).- Los siete ediles del PP de Santiago que fueron condenados por prevaricación han renunciado hoy a sus cargos, y lo han hecho por imperativo legal, ya que la reciente doctrina de la Junta Electoral Central impide que puedan seguir en sus cargos.

    Cinco de los siete ediles condenados por haber decidido en junta de Gobierno sufragar con fondos públicos la defensa de un compañero imputado en la operación Pokemon, que investiga un caso de corrupción en contratas públicas, comparecieron hoy para explicar su postura en torno a este episodio, después de que ayer acordasen dimitir tras una reunión de más de dos horas en la sede del PP.

    La hasta el momento portavoz del Gobierno local, María Pardo, leyó un escrito en el que los siete ediles reiteran su disconformidad con el fallo que les condena a nueve años de inhabilitación para ejercer cargos públicos.

    "Tenemos la plena convicción moral de que la Junta de Gobierno actuó en todo momento en derecho, respetando la ley" por lo que se ha acordado la interposición "inmediata" de un recurso ante la Audiencia Provincial, con la confianza de que sea reconocida su "plena inocencia", señaló Pardo.

    Pese a ello, informó de que la doctrina de la Junta Electoral Central ha declarado que el nuevo supuesto de ineligibilidad de la Ley Orgánica de Régimen Electoral relativo a condenados por sentencia no firme debe aplicarse a los delitos por los que fueron condenados.

    "Por ello, dada la incompatibilidad sobrevenida" los siete ediles decidieron renunciar y ya se han despedido de los funcionarios y los periodistas, a los que agradecieron su labor, pero no han tenido, en cambio, un agradecimiento explícito hacia el alcalde, Ángel Currás.

    Por contra, sí expresaron su gratitud hacia el PP y su presidente, Alberto Núñez Feijóo, por su "respaldo y apoyo inspirado en todo momento en la convicción plena de nuestra inocencia, incluso después de la condena conocida ayer".

    Preguntados por si se han sentido respaldados por el alcalde, Pardo indicó que, en general, sí se han sentido apoyados durante el proceso, pero agregó que en estos momentos ya no están en la vida pública.

    "Permitid -dijo a la prensa- que nos vayamos, defendamos nuestro honor, nuestra dignidad y nuestra inocencia".

    Sobre si respaldan que Currás siga al frente del ayuntamiento, la exedil insistió en que ya no es un cargo público "y no compete pronunciarnos sobre ningún extremo que esté fuera de proclamar nuestro honor y dignidad".

    El exconcejal Francisco Noya aseguró que los siete ediles se marchan "con la cabeza muy alta" y la satisfacción "del deber cumplido, y Pardo añadió que se va con una sensación "fantástica", pero con "algún que otro disgusto".

    Respecto a si renunciarán o no a la militancia en el PP, Pardo aseguró que ésta "es muy cara" y se remitió a los estatutos del partido, "que se aplicarán en sus términos exactos".

    María Pardo confesó no salir del ayuntamiento con rencor, comentó que se ha pasado la mañana despidiéndose de los funcionarios y pidió a los ciudadanos que confíen en la administración local.

    "Marchamos con la sensación de que queremos defender nuestra dignidad, nuestro honor, y nuestra inocencia: por nosotros, nuestra familia y por el Partido Popular, por supuesto", enfatizó.

    En la rueda de prensa, además de Pardo comparecieron Amelia González, Francisco Noya, Cecilia Sierra y Juan de la Fuente, y todos ellos consideraron que la caída del PP en las últimas elecciones europeas no guarda relación con el caso por el que han sido condenados.