El ADN de la pierna hallada en el Ebro es de la mujer asesinada en Zaragoza
Según informa el Instituto Armado en un comunicado, el presunto autor del crimen, compañero sentimental de la víctima, no sólo confesó ante los agentes el homicidio sino que les relató que le había cortado las dos piernas y arrojado al río Ebro.
La investigación se inició el pasado 11 de junio a raíz del intento de suicidio llevado a cabo por el sospechoso en Suances (Cantabria), y el hallazgo de una carta en su poder en la que hablaba del homicidio de su pareja en la vivienda que ambos compartían en el número 30 de la calle Leopoldo Romeo, en el barrio de Las Fuentes de la capital aragonesa.
Los agentes de la Guardia Civil de Cantabria informaron de estos hechos a la Brigada de Policía Judicial del Cuerpo en Zaragoza, quienes se desplazaron de madrugada a la vivienda de la pareja, en cuyo interior localizaron el cadáver descuartizado de la mujer dentro de un arcón congelador y sin sus dos piernas.
La mujer fue identificada como Mercedes Pérez Ruz, compañera sentimental de V.S.G., de 56 años, quien fue detenido como presunto autor del crimen.
De la investigación se hizo cargo inicialmente un juzgado de Torrelavega (Cantabria), a donde fue trasladado el sospechoso para ser atendido en el servicio de urgencias del centro hospitalario de la localidad de las graves lesiones sufridas en su fallido intento de suicidio.
El caso ha recaído finalmente en el Juzgado de Violencia de Género número 2 de Zaragoza, cuyo titular ha solicitado ya el traslado del detenido, mientras que su ingreso en prisión sin fianza fue decretado por el instructor del juzgado cántabro.
Las manifestaciones hechas por los vecinos de la pareja tras hacerse público el crimen revelan que el detenido les explicó unos días antes de desaparecer la mujer que había ingresado en la sección de psiquiatría de un centro hospitalario debido a una fuerte depresión y que no iba a volver.
El estado del cadáver y la falta de sus dos extremidades inferiores llevó a los responsables de la investigación a valorar la posibilidad de que la pierna humana hallada unas semanas antes en Pina de Ebro fuera de la víctima.
Los responsables del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil han podido verificar la correspondencia del ADN de la víctima y determinar finalmente que la referida pierna fue arrojada al cauce del Ebro.
Fuentes de la investigación han explicado a Efe que el traslado del presunto autor del crimen a Zaragoza se podría llevar a cabo en las próximas horas.
El caso de Mercedes Ruz se suma al de otras dos mujeres también descuartizadas en los municipios zaragozanos de Ricla y Cadrete, casos por los que fueron detenidos los compañeros sentimentales de ambas víctimas.
En el caso de Cadrete, el cadáver de la víctima fue hallado a unos cientos de metros del domicilio familiar, mientras que continúa la búsqueda del cuerpo de la mujer asesinada en Ricla.