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El detenido con sustancias para hacer explosivos preguntó cómo comprar cloro



    Madrid, 9 oct (EFE).- El hombre que fue detenido el pasado domingo por esconder sustancias potencialmente explosivas en un hostal del centro de Madrid no solía hablar con otros inquilinos del establecimiento y unos días antes de su arresto preguntó a los encargados del local dónde podía adquirir cloro líquido.

    Según ha explicado a Efe Patricia, la encargada del hostal Rubio, situado en la calle del Conde Romanones de la capital, Alberto R.M., de 48 años, era una persona "a la que no le gustaba la gente ni el ruido" y que "no solía hablar con nadie".

    Residía en el hostal desde mediados del pasado mes de septiembre sin que los encargados del mismo sospecharan nada raro, a excepción de su actitud "poco comunicativa" y de que tenía "problemas de aseo personal".

    El día 1 de octubre Alberto preguntó a la encargada dónde podía comprar cloro líquido, por lo que la mujer se lo comentó a su marido, quien intentó sonsacarle para qué lo quería, sin lograr que se lo aclarase.

    El inquilino, que se acababa de rapar la cabeza, les pidió utilizar su ordenador para consultar en internet dónde podía adquirirlo, ya que lo había intentado en un conocido centro comercial sin éxito.

    No fue hasta seis días más tarde, el domingo 7 de octubre, cuando la mujer entró en la habitación de Alberto para limpiar y descubrió que la estancia estaba cubierta por una capa de polvo negro, que delataba las huellas del inquilino hacia el armario.

    Patricia avisó a su marido y juntos abrieron el armario, donde encontraron bolsas con el mismo polvo y una botella llena de sustancias que no pudieron reconocer, así como un papel en el que había una receta para fabricar "bombas caseras".

    Por eso decidieron avisar a la Policía, que esperó al sospechoso en la puerta para interrogarle.

    Cuando el hombre entró en la habitación con los agentes estaba nervioso, frotándose las manos constantemente y "con una mirada que parecía decir '¿qué he hecho'?", ha relatado Patricia, que ha reconocido que en ese momento, cuando los policías hablaban con el sospechoso, se dio cuenta de que "no era normal".

    La encargada del hostal ha explicado que el ahora arrestado ya había pernoctado allí en julio, aunque sólo dos días, y que hace seis años también se alojó en el establecimiento. En ese momento, aseguró que era vigilante de seguridad de una superficie comercial.

    La Policía ha imputado a Alberto R.M. un delito de tenencia de sustancias para la fabricación de explosivos, ya que en la habitación encontró dos bolsas de polvo de carbón, una bolsa de azufre, un bote con nitrato potásico, un embudo, un mortero para machacar el nitrato y varios petardos grandes con mecha.

    También halló una botella de plástico con tres componentes: una sustancia blanquecina al fondo (nitrato potásico), una amarillenta (azufre) en la zona intermedia y una negra en la parte superior (carbón).

    El detenido tenía también en su poder diversa documentación relacionada con la fabricación de explosivos, entre la que figuraba un manuscrito con instrucciones para producir pólvora y un manual denominado 'Bombas y explosivos caseros', además de diversos planos y anotaciones sobre varios puntos de la Comunidad de Madrid.