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Condenado a 4 años por arrancar la oreja a un joven en un bar de Malasaña



    Madrid, 23 may (EFE).- La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a cuatro años de prisión y a pagar una indemnización de más de 60.000 euros al joven que arrancó una oreja a otro, en julio de 2009, tras una discusión en un bar del barrio de Malasaña.

    En la sentencia de la sección séptima los magistrados han considerado a Alberto G.S. autor de un delito doloso de lesiones con la atenuante de reparación del daño y dilaciones indebidas, y le han condenado también a pagar 61.649 euros a la víctima, Borja V.L., en concepto de indemnización por lesiones y secuelas.

    Además, se ha absuelto a Alberto de un delito de injurias contra la novia de la víctima, María Isabel V.R., ya que la sentencia considera probado que fue su hermano Javier G.S. quien llamó "guarra" a la chica y originó la pelea en el bar "Quiet Man" (Hombre Tranquilo), en la calle Valverde 44.

    A Javier G.S. el tribunal le ha impuesto una multa de 160 euros por una falta de injurias y otra de lesiones, así como al pago de una indemnización de 1.000 euros a María Isabel.

    El abogado de las víctimas, Juan Carlos Sánchez Peribáñez, ha manifestado a Efe que recurrirán la sentencia al considerar que la pena ha sido sensiblemente inferior a la pedida por él y la fiscalía, que se elevaba a 12 y 9 años, respectivamente.

    La sentencia considera probado que en la madrugada del 12 de julio de 2009 los hermanos G.S. coincidieron en la barra del bar con María Isabel, quien tras ser insultada y empujada por Javier, cayó al suelo y perdió la consciencia.

    El novio de María Isabel, Borja, intervino para ayudar a la joven y en ese momento Alberto le mordió la oreja, "desprendiendo su pabellón auricular izquierdo", lesión por la que ha necesitado cinco operaciones quirúrgicas y tratamiento psiquiátrico.

    Al joven le han quedado como secuelas la pérdida de la oreja lo que constituye, según los jueces, "un defecto estético importante y un transtorno depresivo reactivo".

    En el juicio celebrado el pasado 7 de marzo, el principal agresor alegó que había mordido a la víctima "a la desesperada" durante una pelea.