Una víctima de violación en Galapagar dice que ha "caído en el alcohol" por ello
"He caído en el alcohol por su culpa, he tenido un intento de suicidio y estoy medicada por el miedo que tengo", ha destacado la víctima, a la que el tribunal de la sección quinta ha recordado las ayudas que puede solicitar para mejorar su situación.
Además, la mujer ha denunciado que ayer, un día antes del juicio a Yassier E.F, a quien la fiscal ha pedido 19 años de prisión por un delito de agresión sexual continuada y otro de robo con violencia e intimidación, recibió una llamada telefónica de un tío del acusado.
La víctima ha relatado que la noche del 12 de diciembre de 2010 estaba en la tetería "Constantin" de Galapagar y el acusado y un argelino -en paradero desconocido- le ofrecieron unas rayas de coca, lo que rechazó, pero al ver que parecían "amables" dejó que la llevaran a su casa.
"De repente me llevaron a un campo, me agarraron, me dijeron que me 'pinchaban' si no me quitaba las botas y el pantalón, me violaron dos veces cada uno y me arrastraron por la tierra", ha rememorado la mujer, también de origen marroquí.
Asimismo, le robaron 1.200 euros que había cobrado en un trabajo y dos teléfonos móviles, y escuchó al argelino ordenar al marroquí: "córtale el cuello que se acordará de nuestra cara", pero el otro dijo que no, que ya tenían "todo lo que querían".
La mujer, que ha negado ser prostituta, acudió a pedir socorro a la misma tetería y después pudo entregar a la Policía Local un pelo que había arrancado de la cabeza del argelino e identificó por fotos a Yassier, de 22 años.
El acusado, en prisión desde el suceso, ha negado todo y ha comentado que conoció a la mujer en la tetería cuando ella se acercó a él y a un conocido del pueblo.
"De repente empezó a actuar como exhibicionista, enseñando parte de su cuerpo", ha señalado Yassier, quien ha sostenido que ella le invitó a su casa, pero que fueron a la de un primo suyo y allí mantuvo relaciones sexuales a cambio de 50 euros.
Al salir vieron al otro hombre de la tetería y el acusado ha añadido: "yo la dejé con él", "no puedo entender por qué me ha denunciado".
La dueña de la tetería y su madre, de origen argelino, han declarado que aquél día la mujer estuvo bailando "muy borracha" y se golpeó contra el suelo.
Los agentes que atendieron a la mujer han testificado que mantuvo un relato "coherente" a pesar de estar "muy alterada", que llevaba la ropa mal puesta y presentaba lesiones en la cara.
Los médicos han resaltado que la víctima tenía señales de haber sido agarrada con fuerza y arañazos con restos de tierra.
La defensa ha solicitado la libre absolución de Yassier.