La Justicia de Madrid tumba la petición de los ecologistas de suspender las obras de la Línea 11 de Metro
- La Sala entiende que habría mayores perjuicios ambientales y económicos
- Decide rechazar sus argumentos ante la falta de exactitud en sus pretensiones
Jorge Velasco
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid (TSJM) ha rechazado las medidas cautelares interpuestas por Aedenat- Ecologistas en Acción para suspender las obras que amplían la Línea 11 de Metro en las zonas comprendidas de Arganzuela-Madrid Río y Comillas al presuponer que la reforma del transporte público supone un perjuicio al medio ambiente urbano y a la calidad de vida de los residentes. Según la sentencia con fecha a 3 de mayo de 2023.
La confederación de ecologistas argumentó ante la Sala que continuar con las obras se traduce en una evidente "tala masiva" de árboles dentro de una zona singular causando un perjuicio irreparable. Las empresas contratadas para sacar adelante el proyecto contestaron a los argumentos de los Ecologistas y manifestaron que en sus consideraciones no hay ningún argumento concreto que especifique en número de árboles que serían cortados o las consecuencias medioambientales que se produciría en caso de seguir adelante con la ampliación del Metro.
A su vez, exponen que la reforma del transporte público supone "una mejora estratégica y cualitativa del transporte público para la Comunidad de Madrid que incrementa la oferta de este medio de transporte y que contribuye, en contrapartida, a reducir de modo notable la emisión de gases de efecto invernadero causados por el transporte privado".
La Sala, ante los argumentos manifestados por ambas partes, se posicionó a favor de las empresas constructoras y testificó que la paralización de las obras generaría un perjuicio medioambiental más grave del que defienden los ecologistas ya que la ampliación de la Línea de Metro "reduce el tráfico rodado privado y las emisiones de gases de combustión, ayudando así a combatir el cambio climático", comenta el TSJM.
Al mismo tiempo, añade que no solo produciría un riesgo ambiental, sino también supone un grave perjuicio económico ya que habría que indemnizar a las constructoras por los daños y perjuicios ocasionados, cifra que rozaría los 25 millones de euros.
Por tanto, los magistrados fallan a favor de tumbar las medidas cautelares expuestas por los ecologistas y continuar con las obras de ampliación de la Línea 11 del Metro de la capital, ante la falta de concreción en sus argumentos. "No existe certeza de cuál sería el preciso fin a perseguir con la medida cautelar solicitada: si evitar la tala de determinados árboles en el Parque de la Arganzuela, o si lograr, mediante la pretendida paralización de la tala de árboles una finalidad más amplia", sentencia la Justicia de Madrid.