Internacional
Tham Luang, así es la cueva en la que están atrapados los 12 niños y su entrenador en Tailandia
- Forma parte de un sistema de túneles de 10 kilómetros longitud
elEconomista.es
La cueva en la que se ha encontrado a los 12 niños y su entrenador, después de 9 días de búsqueda, forma parte de un sistema de túneles de 10 kilómetros longitud. Tham Luang Nang Non, que es el nombre de la gruta, es la cuarta más grande del país y una atracción muy popular entre los turistas, que se aventuran entre su entrada más expuesta.
No obstante, la gruta va estrechándose a medida que se avanza por sus túneles hasta el punto de que por algunos recovecos sólo es posible pasar arrastrándose. En algunos tramos estos corredores dan paso a estancias más amplias, moldeadas en la roca por la humedad.
Es en una de estas grutas más amplias es las que se encuentran los niños, con los túneles que les comunican con el exterior anegados de agua, según Europa Press. Es conocida también por el gran número de estalagmitas y estalactitas.
La cueva está situada en el distrito de Mae Sai, en la región de Chiang Rai, a menos de dos kilómetros de la frontera con Birmania. Se recomienda que nadie se adentre en ella durante la temporada de lluvias o monzones (de mayo a octubre) porque corre el riesgo de inundarse, como ha pasado en esta ocasión. Es por este motivo que el Gobierno de Tailandia estudia la posibilidad de emprender acciones legales contra el entrenador de fútbol, ya que los niños estaban bajo su responsabilidad.
En 2007, seis turistas y sus dos guías tailandeses murieron al verse atrapados por una repentina inundación en una cueva del parque nacional Khao Sok, en el sur de Tailandia.
Los 12 niños y su entrenador desaparecieron el pasado sábado 23 de junio. Después de un entrenamiento, se dirigieron a la gruta y dentro se les perdió la pista. Los servicios de rescate encontraron sus bicicletas y algunos de sus enseres en la entrada, pero ni rastro del equipo. La búsqueda se ha complicado debido a las lluvias, que han provocado que haya algunos túneles que estén completamente inundados.
Los niños y su entrenador, sanos y salvos, podrían permanecer en la cámara en la que se encuentran ahora mismo varias semanas o incluso meses. El rescate es complicado, ya que tienen que recorrer buceando, a oscuras y por aguas enfangadas, varios kilómetros, algo que solo está al alcance de profesionales.