Internacional

Tropic, la joya submarina de minerales estratégicos que enfrenta a España y Marruecos cerca de Canarias

  • El antiguo volcán es una mina para el desarrollo de la tecnología verde
  • Alberga unos ecosistemas casi únicos y en un estado prácticamente puro
  • España intenta demostrar que se trata de una prolongación natural de Canarias

María Medinilla

La pugna entre España y Marruecos por la tutela de las aguas próximas a Canarias no es casual. El fondo marino que ambos reclaman como suyo ante Naciones Unidas esconde un tesoro de nombre Tropic, un monte submarino virgen con un ecosistema único y de una riqueza casi exclusiva en minerales clave para la revolución energética verde.

Tropic es un volcán extinto que se levanta en el Atlántico desde una profundidad de 4.200 metros hasta 1.000 metros por debajo del nivel del mar y es el monte más alto de los ubicados de la llamada Provincia Volcánica de las Islas Canarias, que incluye las montañas submarinas Eco, Drago, Bimbache y The Palps (conocidas como 'las abuelas de Canarias').

Su existencia quedó registrada antes pero fue en 2016 cuando se desveló el verdadero tesoro que promueve el interés de España y Marruecos. Una expedición del Centro Nacional de Oceanografía de Reino Unido y de Instituto Geológico y Minero de España (IGME) descubrió que el antiguo volcán era ahora una mina de telurio, una alhaja para el desarrollo de la tecnología verde. Unos meses antes, un artículo publicado en Ore Geology Reviews en el que también participó la Universidad Complutense destacaba la riqueza mineral de Tropic en cobalto, vanadio, bario, níquel o plomo pero el telurio no estaba entre los minerales referidos. 

Aquella expedición descubrió que la costra del monte guarda una reserva única en el mundo de telurio (unas 2.600 toneladas) y cobalto. Según sus estimaciones, publicadas en Science en 2016, con el cobalto de Tropic podrían construirse 277 millones de coches eléctricos y la extracción del telurio daría para fabricar los paneles solares suficientes para cubrir la mitad del consumo eléctrico de Reino Unido.

Pero el yacimiento de estos minerales calificados de "estratégicos" no es el único tesoro que esconde Tropic. Hay otra joya viva en el antiguo volcán que podría echar al traste cualquier posibilidad de explotar el 'cofre': el monte acoge un ecosistema único, en estado de conservación "prístino", que científicos de todo el mundo piden preservar y declarar como Área Ecológica y Biológicamente Significativa, según una publicación de 2019 en la revista Frontiers un Marine Sciencies.

A lo largo y ancho de la maravilla natural que defiende ese grupo de científicos habitan numerosos ecosistemas marinos "vulnerables" formados por 15 especies de corales, esponjas de características "únicas" o huevos de calamares de aguas profundas. Todas ellas especies de crecimiento muy lento y muy frágiles ante cualquier impacto humano.

Ni de España ni de Marruecos (por ahora)

Tropic está en aguas internacionales por lo que no entra en las fronteras de España y Marruecos ante el interés mostrado por ambos países para conseguir su tutela. El debate se ha reabierto esta semana al dar Marruecos el paso de aprobar la ampliación de su delimitación por mar solapando parte de las aguas próximas a Canarias, un intento que probó a finales del año pasado pero que el Gobierno de España, en funciones, consiguió frenar.

¿Pueden Marruecos o España aprobar por su cuenta la extensión? La respuesta, que es negativa, requiere de una explicación algo profunda que comienza por acudir a la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (1982).

Ese tratado multilateral delimita los países más allá de las fronteras por tierra. Así, establece que los países podrán ejercer su soberanía sobre las 12 primeras millas náuticas (22 kilómetros) de mar desde su costa, zona delimitada que se llamará "mar territorial" y que incluye aire, agua, suelo y subsuelo. Además, reconoce como zona económica exclusiva (ZEE) la que se extiende de las 12 millas a las 200 millas (370 kilómetros). En ese espacio concedido por la norma internacional, el país es soberano para la explotación, conservación o administración en general de todos los recursos naturales de mar y subsuelo. 

Tropic se ubica a algo más de 269 millas náuticas (499 kilómetros) de La Restiga, en la isla de El Hierro, y a 360 de Gran Canaria (en concreto, 677 kilómetros desde Maspalomas); es la única de 'las abuelas de Canarias' que quedan fuera de las 200 millas españolas. Tampoco queda 'a tiro' de la ZEE de Marruecos. De ahí que los dos países hayan solicitado a la ONU -primero España en 2014 y en 2017 Marruecos- la ampliación de su plataforma continental para adquirir los derechos sobre el subsuelo, hasta las 350 millas que se pueden solicitar si se presentan los informes, tanto oceanográficos como legales oportunos; en los presentado por España, el Gobierno intenta demostrar que se trata de una prolongación natural de Canarias y no del continente Africano. 

¿Y el Sahara Occidental?

El encontronazo entre Marruecos y España reside en el solapamiento de las aguas que se reclaman. La proximidad entre ambos hace que aún no exista una delimitación de las ZEE de cada uno de ellos, que acordaron una mediana imaginaria en la que cualquier punto de conflicto se ha resuelto con acuerdo.

Además, Marruecos parte de una base no compartida internacionalmente. Al reclamar Tropic como una prolongación de su país, toma el territorio del Sahara Occidental como propio (lo ocupó en 1975) pero Naciones Unidas lo considera desde 1960 como zona en proceso de descolonicación. De hecho, el Frente Polisario ha pedido a España que actúe ante este nuevo intento de apropiación de Marruecos y asuma sus "responsabilidades históricas", según consideró el Secretario Nacional y Responsable del Comité de Relaciones Exteriores del Polisario, Mohamad Jadad, en declaraciones tras la luz verde del Parlamento marroquí para ampliar su frontera por mar.