La batalla por los 80 millones de dólares de Gene Hackman desata una "Tercera Guerra Mundial": sus tres hijos en el foco
- Se han conocido detalles de las últimas voluntades de Betsy Arakawa, esposa del actor también fallecida
- Gene Hackman murió una semana después que su mujer, ambos por causas naturales
- Los siete últimos días de Gene Hackman: enfermo, sin móvil y sin poder hacer nada frente al cadáver de su mujer
Informalia
Hace una semana, la autopsia esclareció las causas de la muerte de Gene Hackman y su esposa, la pianista Betsy Arakawa, quienes fueron encontrados sin vida y en estado de momificación en su domicilio de Santa Fe, Nuevo México, el pasado miércoles 26 de febrero. Un infarto provocó la muerte del actor una semana después (según la autopsia) que la de su mujer, que murió a causa de un hantavirus, un virus potencialmente mortal que puede causar insuficiencia respiratoria y que es transmitido por ratones. Ambas fueron consideradas "causas naturales", aunque quedan por cerrar pequeños flecos oficiales de la investigación.
Ahora, en cambio, el foco está en el testamento del actor, poseedor de una fortuna de 80 millones de dólares. Hay que recordar que era padre de Christopher Allen, de 65 años; Leslie Anne, de 58 años; y Elizabeth Jean, de 62; y ahora la atención recae sobre ellos, pues la relación que mantenían con su progenitor no era precisamente cordial. De hecho, hace días conocimos que Leslie Anne no sabía nada de su padre desde hace meses.
Sobre el reparto de la fortuna, adelantan en el Daily Mail: "Si él hubiera muerto primero y ella [Betsy] hubiera sobrevivido, habría sido la Tercera Guerra Mundial. Sus hijos probablemente se habrían vuelto locos", señalan fuentes cercanas.
No se conocen detalles acerca del testamento de Hackham, pero sí de Arakawa, que indicó que todo su patrimonio iría para su marido, Hackman, en caso de morir ella antes que él, como así acabó ocurriendo según la autopsia.
De lo contrario, señaló en sus últimas voluntades: "Si mi cónyuge no me sobrevive, le doy el remanente de mi patrimonio a mi representante personal, como fideicomisario, para que lo mantenga y administre en un fideicomiso caritativo para fines beneficiosos de la comunidad, en consonancia con las preferencias e intereses caritativos expresados o indicados por mi cónyuge y por mí durante nuestras vidas". Su herencia, por su parte, será gestionada por la abogada Julia Peters, que también tendrá que asegurarse de que se cumplan, además, las posibles indicaciones de Hackman en su testamento, pues ha sido designada como la albacea de ambos.
Y en todo este contexto, ha llamado poderosamente la atención el hecho de que el hijo mayor del actor haya contratado a Andrew M. Katzenstein, un destacado abogado especializado en fideicomisos y sucesiones de California. "Al contratar a Katzenstein, demuestra que él [Chris] definitivamente está tratando de proteger sus intereses", indican el mismo diario. Sus dos hermanas, en cambio, no han optado por la misma vía, al menos que se haya conocido hasta ahora. "Debe haber algún problema gestándose", sostiene el medio británico.
Hay que recordar también que en el caso del reparto de la herencia las particularidades de las leyes de Nuevo México también influyen.