Casas Reales

Mette-Marit, investigada por sus mensajes con Marius Borg: la Fiscalía busca señales de encubrimiento durante los presuntos delitos


Informalia

La Casa Real noruega atraviesa un momento delicado. Marius Borg, primogénito de Mette-Marit, está acusado de 32 delitos y se enfrenta a una pena de diez años de prisión. La Fiscalía cerró la investigación en junio y la acusación se presentó en firme el pasado lunes. Incluía el testimonio de más de 60 personas y cientos de miles de archivos multimedia y mensajes con información preocupante. "Se trata de actos muy graves que pueden dejar huella y destruir vidas. La pena máxima para los delitos mencionados en la acusación es de cárcel de hasta diez años", informó el ministerio público, avanzando que en enero de 2026 podría arrancar un litigio en el que, probablemente, deberán testificar los familiares del joven, de 28 años. Su círculo entra en las investigaciones, que incluyen a la princesa heredera consorte.

Por el momento, ningún miembro de la familia real ha sido interrogado, pero Sturla Henriksbø, fiscal general del Estado de Noruega, ha confirmado que los mensajes o correspondencia que hayan mantenido los príncipes Haakon y Mette-Marit con víctimas o testigos del caso se han incluido en la investigación. "En la medida en que existan mensajes entre particulares y familiares del acusado relacionados con el caso, se habrán incluido en el material de investigación, sí", ha afirmado, confirmando que ya tiene esos mensajes en su dominio.

Cabe recordar que en noviembre del pasado año, tras el altercado de Marius con su exnovia en un apartamento en Oslo, se habló de la implicación de Mette-Marit en la supuesta ocultación de este delito. "Notificó a Marius Borg que la policía iba a arrestarle y limpió la casa de su hijo", explicaron los medios noruegos sobre la futura reina consorte. "El 4 de agosto, Marius Borg Høiby es detenido y acusado de violencia contra su entonces novia. Aproximadamente media hora antes del arresto, la policía se pone en contacto con él por teléfono y le avisan de que van a arrestarlo. Pero Marius ya debía saber lo que le esperaba", contaron. "Según el registro policial, desde que la policía llamó a Høiby hasta que lo arrestaron en la escuela pasaron 33 minutos. Durante ese tiempo, la princesa heredera Mette-Marit, que vive al lado, habrá limpiado la casa de la que dispone Høiby. Más tarde, lo llevó a la escuela de Jansløkka, donde le esperaba la policía".

La princesa no se ha pronunciado sobre las investigaciones de la Fiscalía, aunque en los últimos meses se ha hablado de los problemas de salud que le ha provocado esta situación. Su fibrosis pulmonar crónica se alargó, lo que la apartó de sus compromisos durante un tiempo. Sí ha hablado, en cambio, su marido, el príncipe Haakon de Noruega. "Ha sido desafiante y difícil para todos", reconoció este martes a NRK. Y añadió, precavido: "Ya se ha aclarado cuál será la acusación. Ahora le corresponde al tribunal decidir". También explicó que los miembros de la Casa Real seguirán cumpliendo con sus obligaciones y su agenda institucional al margen de la polémica: "Por nuestra parte, seguiremos cumpliendo con nuestras tareas".

Acusado de 32 delitos

El relato de la Fiscalía es aterrador. Afirman que Marius habría llevado a cabo, supuestamente, cuatro violaciones desde el año 2018. La primera en su apartamento de Skaugum, cuando solo tenía 21 años; mantuvo sexo con una mujer drogada y lo grabó todo. La segunda ocurrió en Lofoten en 2023; la víctima, una mujer que conoció a Marius esa misma noche. Tras mantener relaciones sexuales consentidas, Marius la forzó mientras dormía y lo grabó. El tercer delito se cometió en Skillebekk, Oslo, en marzo de 2024, y el cuarto en Tøyen, Oslo, en noviembre de 2024, ambos con el mismo patrón que en las dos anteriores: mujer dormida y dispositivo de grabación.

La policía ha investigado imágenes que involucran hasta a 16 mujeres diferentes, pero muchos de los casos han sido sobreseídos por prescripción o por el estado de las pruebas. La policía ha encontrado "una gran cantidad de películas e imágenes" que muestran la intimidad "de varias mujeres" al registrar los teléfonos móviles y otros soportes de datos del hijo de Mette Marit.

La relación de delitos que presenta la Fiscalía pone los pelos de punta: un caso de violación con coito, dos casos de violación sin coito, cuatro casos de conducta sexualmente ofensiva, un caso de abuso en relaciones cercanas, dos casos de lesiones corporales, un caso de daño malicioso, un caso de amenazas, cinco violaciones de orden de restricción, un caso de abuso sexual por parte de un agente de policía y cinco infracciones de tráfico.