Indices Mundiales
Los pequeños inversores pueden hacerse de oro a costa de los hedge funds
¿Estamos en el mundo al revés? Eso es lo que cabría pensar de una nueva forma de hacer negocio de los brokers minoristas que cuenta en un reportaje de fin de semana el portal norteamericano MarketWatch.
Lo cierto es que el boom de los hedge funds en los últimos años apenas ha ofrecido oportunidades a los inversores con menos recursos, que no pueden acceder a las estrellas de la gestión mundial. Además, muchos de estos fondos se basan en ser más listos que el mercado; dicho de otro modo, lo que ellos ganan, normalmente lo pierden los pequeños inversores.
Pero de repente ha surgido una oportunidad en un nicho del negocio que les permite generar una rentabilidad adicional de las acciones que tienen en sus cuentas de valores. Como es sabido, la mayoría de los hedge funds se ponen cortos (esto es, toman posiciones bajistas), bien para reducir la exposición alcista de su cartera, bien de forma esporádica en busca de caídas relevantes del mercado, bien para hacer arbitraje con otras posiciones alcistas, bien porque tienen un sesgo bajista (short biased).
Para ponerse bajista en un valor, se toman prestadas las acciones para venderlas en mercado con la esperanza de recomprarlas a un precio más bajo y devolverlas a su propietario al precio original, con lo que se gana la diferencia. Además, hay que pagar un tipo de interés por el préstamo. Normalmente, los grandes bancos de inversión que poseen grandes posiciones en las empresas son los que prestan los títulos a los hedge funds.
Buscar títulos donde haga falta
Pero resulta que ahora estamos en una época de escasez de acciones para prestar, en parte por las recompras masivas de sus títulos por parte de muchas empresas, que han reducido notablemente su capital flotante en bolsa. Y es ahí donde entra el inversor particular, porque los brokers le están ofreciendo que preste sus acciones, aunque sean pocas, a cambio de un atractivo tipo de interés que puede llegar al 7%. El primero en ofrecer este servicio fue el broker online Charles Schwab, al que han imitado sus competidores E-Trade y TD Ameritrade. El eslogan del primero de ellos es muy elocuente: Valores difíciles de encontrar, oportunidades difíciles de resistir .
Por supuesto, detrás de estos servicios no hay un mero altruismo, sino que los brokers online persiguen un objetivo muy claro: entrar en el lucrativo negocio del préstamo de valores, dominado hasta ahora por los gigantes de Wall Street, que generan más de 5.000 millones de dólares anuales en ingresos de los servicios de prime broker para los fondos alternativos, entre los que se encuentra el préstamo de valores.
Una lista muy elocuente
Charles Schwab elabora una lista de los valores más difíciles de tomar prestados, que ha obtenido MarketWatch. Sus resultados son elocuentes por los sectores a los que pertenecen estas empresas, normalmente bastante pequeñas. A la cabeza, las biotecnológicas, con nombres como Dendreon, Northfield Labs y Neurometrix. Como no podía ser de otra forma, hay una nutrida representación de las inmobiliarias y constructoras, así como entidades especializadas en el negocio hipotecario.
También llama la atención el interés de los hedge funds en ponerse bajistas en los productores de etanol y otras energías renovables, lo que apoya la tesis de que estamos en una burbuja de todo lo relacionado con el cambio climático. Respecto a grandes nombres, sobresalen el gigante de las bebidas Diageo, los almacenes J.C. Penney y la firma de lujo Gucci.
En EEUU, se estima que el volumen de valores prestados para posiciones bajistas es de 717.000 millones de acciones. Y los pequeños inversores están encantados de poder obtener una rentabilidad adicional independientemente de que los hedge funds acierten o no, y con muy poco riesgo.
Cierto peligro sí que hay: que le prestes las acciones a un fondo que quiebre, y luego tengas problemas en recuperarlas. En todo caso, si ha hecho falta acudir al minorista en un mercado en el que el préstamo de valores está tan desarrollado, ¿no podría ocurrir lo mismo en un país donde está tremendamente subdesarrollado? Empieza por E.