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McCain pide sin éxito cancelar el debate con Obama e invoca la crisis financiera



    Los candidatos demócrata y republicano a la presidencia de EEUU, Barack Obama y John McCain, chocaron duro en su primer debate electoral, celebrado este sábado de madrugada (hora española) y que dejó claras sus diferencias sobre la actual crisis financiera y en política exterior.

    Obama pareció más cómodo al inicio del debate, hablando de temas de política interior, con definiciones claras sobre su plan de gobierno en materia de energía, salud o educación, mientras que McCain apeló a su experiencia en los temas de política exterior que dominaron el debate, para tratar de marcar diferencias con el demócrata, que le aventaja en las encuestas.

    El debate, celebrado en Oxford (Misisipi), duró 90 minutos y estuvo centrado en la crisis financiera, la seguridad nacional y la política exterior. Los candidatos a suceder a George Bush en la Casa Blanca comenzaron como era previsible por el tema que más preocupa a los estadounidenses: la profunda crisis que hace tambalear el sistema financiero más poderoso del mundo.

    El senador demócrata, que en todo momento presentó a su rival como un continuador del impopular presidente, afirmó que la crisis es "el corolario de ocho años de fracasadas políticas económicas promovidas por George Bush, apoyadas por el senador McCain". Por su parte, el congresista republicano aseguró haber advertido sobre la inminencia de la crisis y defendió un plan que permita mantener "estables" las instituciones de Wall Street.

    Tras un fuerte cruce de acusaciones de querer aumentar impuestos, mientras el moderador del debate, el periodista Jim Lehrer, les pedía en vano definir su posición sobre el plan de rescate del sistema financiero que negocian la Casa Blanca y el Congreso, los candidatos se abocaron a política exterior.

    La guerra en Irak, Irán, Pakistán y Rusia fueron algunos de los tópicos que abordaron los postulantes para las elecciones presidenciales del 4 de noviembre. McCain, de 72 años, defendió la actual estrategia norteamericana en Irak que implicó un aumento de tropas propuesto por él.

    El aumento de tropas "fue un éxito y Estados Unidos está ganando en Irak, y volveremos a casa victoriosos y con honor", añadió, al tiempo que adviritió que los planes de su rival para terminar la guerra podrían resultar en un fortalecimiento de la red terrorista Al Qaida.

    Obama, de 47 años, reiteró su oposición desde el comienzo a la invasión de Irak en 2003 y dijo que la guerra debe terminar con una retirada de tropas en 16 meses, pero también enfatizó que Estados Unidos debe concentrar sus recursos militares en Afganistán en donde asegura que está el principal foco de amenaza.

    Obama incluso fue más allá en su posición sobre un eventual uso de la fuerza si llega al gobierno, al advertir de que atacaría blancos extremistas en territorio paquistaní con o sin el aval de Islamabad: "Si EEUU tiene a Al Qaeda, a (Osama) Bin Laden o a sus lugartenientes en su punto de mira, y Pakistán no actúa o es incapaz de actuar, entonces deberemos eliminarlos".

    Uno de los momentos álgidos del debate y que definió con más claridad las diferencias de los dos candidatos sobre Irak, tuvo más de gesto que de verbo. Se produjo cuando McCain exhibió un brazalete y dijo que se lo había obsequiado la madre de un soldado muerto en Irak que le pidió "que su muerte no haya sido en vano". Obama replicó mostrando un brazalete similar, y dijo que se lo dio la madre de un soldado que le pidió que no hubiera más brazaletes como ése.

    Los dos candidatos volvieron a chocar sobre la forma de tratar a líderes opuestos a Estados Unidos como el presidente iraní, Mahmud Ahjmadinejad, o el presidente venezolano, Hugo Chávez. McCain dijo que la propuesta de Obama de reunirse con líderes mundiales opuestos a Estados Unidos "sin precondiciones" -un término utilizado por su adversario- es un error pues significaría "legitimarlos".

    Sin embargo Obama, calificado de "inocente" por McCain, explicó exactamente su postura: "No podemos esperar resolver todos los problemas antes de dialogar", sostuvo, y reiteró que primero propiciaría reuniones diplomáticas de menor nivel que citas presidenciales. McCain por su parte, volvió a acusar a Obama de haber no haber reaccionado con fuerza durante la crisis entre Georgia y Rusia el mes pasado.

    Un encuesta telefónica al instante sobre 524 televidentes hecha por la cadena televisiva CNN y Opinion Research Corp. da cuenta de una victoria de Obama sobre McCain por 51% a 38% en su desempeño en el debate del viernes. Los dos postulantes volverán a medirse el 7 de octubre en un nuevo foro televisado.