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Rusia busca apoyo chino frente a la presión occidental por Georgia
"El presidente ruso ha informado a su par chino sobre la situación en Osetia del Sur y Abjasia", dijo la portavoz del Kremlin Natalya Timakova tras esas conversaciones.
El viaje a Dushanbé es el primero de Medvedev al extranjero desde que Rusia y Georgia se vieran implicadas en un breve conflicto armado este mes sobre las dos regiones separatistas, cuya independencia fue reconocida por el mandatario ruso el martes, generando fuertes críticas.
Occidente condenó de inmediato esa decisión. El presidente estadounidense George W. Bush advirtió de que Moscú debe echarse atrás y el canciller francés Bernard Kouchner dijo: "tememos una guerra". China se dijo el miércoles preocupada por la decisión rusa de reconocer la independencia de las dos regiones separatistas georgianas.
"China está preocupada por los últimos acontecimientos en Osetia del Sur y Abjasia", afirmó el portavoz de la diplomacia china, Qin Gang, citado por la agencia oficial China Nueva. Desde el anuncio del reconocimiento ruso, el martes, China se había limitado a llamar a Moscú y Tiflis a buscar "una solución adecuada mediante el diálogo".
Abjasia y Osetia del Sur son vistas aún internacionalmente como partes de Georgia y ningún país se ha sumado aún a Rusia para reconocer su independencia. Las regiones manifestaron sus intenciones separatistas después de la caída de la Unión Soviética en 1991.
La confrontación amenaza con tener repercusiones más amplias sobre las ya tensas relaciones entre Rusia y Occidente. Rusia ha congelado sus lazos militares con la Alianza Atlántica y acusa a Estados Unidos de rearmar a Georgia.
En un discurso televisado, Medvedev dijo que su decisión era necesaria para proteger las vidas de los abjasios y los osetas del sur y se ajustaba al derecho internacional, añadiendo: "Rusia llama a otros estados a seguir su ejemplo".
Sin embargo el canciller ruso Sergei Lavrov dijo después que "no vamos a torcerle el brazo a nadie para que reconozca a Osetia del Sur y a Abjasia". Medvedev se reunió con el presidente chino antes de una cumbre el jueves de la Organización de Cooperación de Shanghai (SCO), un grupo de seguridad regional dominado por China y Rusia del que forman parte cuatro países de Asia Central.
Los líderes ruso y chino hablaron acerca de la conveniencia de fortalecer el SCO, creado en 2001 como un contrapeso a la influencia de la OTAN en la estratégica región centroasiática. Durante su viaje a Dushanbé, Medvedev también debe sostener conversaciones bilaterales con los dirigentes de Afganistán, Irán, Kazajistán, Tayikistán y Uzbekistán.