El capitán del crucero Costa Concordia apela su despido
El italiano Francesco Schettino no sólo fue despedido por Costa Cruceros, sino que también está acusado por la fiscalía de causar el accidente al llevar el crucero demasiado cerca de la orilla.
Se enfrenta a cargos de homicidio múltiple y de abandonar el barco, y la vista preliminar comenzará el 15 de octubre.
"Es el derecho de cualquier trabajador apelar su despido, y el capitán Schettino no ha hecho más que ejercitar ese derecho", dijo Bruno Leporatti.
"No hay nada que discutir o de lo que sorprenderse, a menos que queremos decir que lo que la ley permite a todos los ciudadanos no se aplica a Francesco Schettino", afirmó.
Schettino fue ridiculizado en Italia y en el extranjero tras el desastre del 13 de enero en la costa de la isla toscana de Giglio, y su nombre se convirtió en símbolo de incompetencia y cobardía.
La airada orden de "¡Vuelva a bordo, maldita sea!" que dio a Schettino por teléfono un guardia costero, después de que el capitán abandonara la nave, se convirtió en un lema impreso en camisetas en Italia.
Los investigadores dicen que Schettino llevó el navío de 290 metros demasiado cerca de tierra, demoró la evacuación y perdió el control de las operaciones, abandonando el barco cuando muchos de los 4.200 pasajeros y tripulantes seguían a bordo.
El capitán, nacido en Nápoles, siempre ha admitido haber cometido errores cuando quedó claro que el Costa Concordia, de 144.400 toneladas, estaba en problemas, pero ha dicho que no es el único al que debería culparse por la tragedia.