El crecimiento de EEUU se acerca más a la recesión
Las palabras del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, ayer desde Jackson Hole, Wyoming, llegaron precedidas por una revisión a la baja del Producto Interior Bruto de Estados Unidos, que durante el segundo trimestre del año creció sólo un 1 por ciento, frente al 1,3 por ciento previamente estimado.
Las cifras dadas a conocer por el Departamento de Comercio tienen su justificación en unas exportaciones y unos inventarios empresariales mucho más débiles de lo previsto. Una vez más, se confirma que durante la primera mitad de 2011, la economía del país se encuentra sumida en un atolladero del que parece difícil salir.
El consenso del mercado esperaba que el crecimiento entre los meses de abril y junio fuera rebajado hasta el 1,1 por ciento, después de que durante el primer trimestre del año, la economía se expandiera sólo un 0,4 por ciento. Ahora, después de conocer como los inventarios empresariales aumentaron sólo en 40.600 millones de dólares frente a los 49.600 millones de dólares anteriormente anunciados, la economía de estadounidense comienza de nuevo a adentrarse en un periodo de estancamiento, que bien podría conducir a una nueva recesión.
En el lado positivo, el gasto del consumidor subió un 0,4 por ciento en el segundo trimestre en lugar del 0,1 por ciento como había informado inicialmente. El gasto del consumidor es la mayor fuente de crecimiento en la economía de EEUU. Aún así, la confianza del consumidor de Estados Unidos cayó durante el presente mes de agosto más de lo esperado ya que los consumidores no creen en la capacidad de la clase política para superar la amenaza de una nueva recesión. El índice de confianza de los consumidores de Thomson Reuters y la Universidad de Michigan en agosto superó el nivel de mediados de agosto pero sigue anclada en los mínimos propios de la crisis. Así, la lectura definitiva fue de 55,7 puntos, por encima de los 54,9 puntos de mediados de agosto, pero por debajo los 63,7 puntos de finales de julio.
Desde IHS Global Insight, su economista jefe, Nariman Behravesh, advirtió que " la economía de EEUU se acerca peligrosamente a una ausencia de crecimiento". El experto afirmó que, según los datos que maneja la consultora, "el crecimiento en la segunda mitad del año apenas alcanzará el 1 por ciento mientras el próximo año se espera un incremento modesto de entre el 1,5 por ciento y el 2,0 por ciento", añadió.
Pero no sólo desde el ámbito estrictamente macroeconómico se aprecia síntomas de una contracción de la actividad. Si nos fijamos en las empresas estadounidenses las perspectivas no resultan para nada alentadoras. Así, tenemos que entre las 20 compañías americanas a las que más les han recortado, desde comienzos del verano, las estimaciones del beneficio total para 2011 tenemos a algunos de los pesos pesados de la economía americana, sobre todo de los que componen el sector financiero
Entre los nombre propios destacan Bank of America (BofA), Morgan Stanley y Goldman Sachs. Las dudas que se ciernen sobre la banca no se disipan y BofA está en el ojo del huracán. Esta semana su cotización ha bailado a los vaivenes por un lado de la posibilidad de que J.P. Morgan podría comprar esta entidad con el respaldo del Gobierno Federal y por otro de la irrupción del multimillonario Warren Buffett invirtiendo 5.000 millones de dólares comprando títulos de esta entidad.
Tampoco los analistas pasan por alto la situación de esta empresa y desde el 21 de julio le han recortado sus perspectivas de ganancias en más de 13.000 millones de dólares, de manera que en opinión de la media de analistas que recoge FactSet, este banco incurriría en unas pérdidas por valor de 2.354 millones (ver gráfico). En el caso de Morgan Stanley y Goldman Sachs los expertos han recortado sus expectativas de ganancias un 50 y un 25 por ciento, respectivamente.
Pero los problemas no se focalizan sólo en el ámbito de las finanzas. Entre las compañías a las que los analistas han dado un mayor tijeretazo hay empresas de los más variopinto. Incluso entre las tecnológicas, un segemento del mercado que estaba resistiendo bastante bien el temporal tiene sus ovejas negras. Como es el caso de Cisco Systems, Hewlett-Packard y Juniper Networks a las que el tijeretazo se cuantifica en 1.115, 521 y 235,6 millones de dólares respectivamente.
Ni siquiera se salva de la incertidumbre Berkshire Hathaway, el vehículo de inversión de Warren Buffett al que las casa de analistas han mermado sus perspectivas de ingreso neto en casi 400 millones de dólares. No obstante si hubiera que romper una lanza por los valores que integran esta lista negra, merece señalar que ninguno obtiene una recomendación de venta por parte del consenso de mercado. Es decir, los expertos no esperan que la evolución de las acciones de estas compañías sea peor a la que vayan a seguir los mercados bursátiles, aconsejando mantener e incluso tomar posiciones con estas empresas en la cartera de inversión.