Un ejecutivo de BP dice que hubo confusión en pruebas del pozo
La plataforma, propiedad de Transocean, estaba perforando el pozo para BP a 1,6 kilómetros bajo la superficie marina en el Golfo de México, cuando se se incendió y explotó el 20 de abril, causando 11 muertos y desatando el peor derrame de petróleo mar adentro en la historia de Estados Unidos.
Daun Winslow, gerente de Transocean, dijo que escuchó sin querer una conversación entre empleados de BP y de la firma en la cubierta de la plataforma de perforación respecto a una prueba diseñada para medir la presión de gas en el pozo Macondo.
"Al parecer había cierta confusión sobre cierto tipo de presión", dijo Winslow ante un panel conformado por la Guardia Costera de Estados Unidos y la oficina estadounidense que gestiona asuntos de energía en mar abierto.
"Pensé que no era buena idea tener a un grupo visitando la instalación", agregó.
Winslow forma parte de un grupo de ejecutivos de alto rango que visitó la plataforma el 20 de abril para conmemorar siete años de operaciones sin accidentes.
INVESTIGACIONES EN CURSO
Hay diversas investigaciones federales en curso en torno a la causa del desastre, que aún se desconoce.
La declaración de Winslow corrobora el testimonio del operador mecánico de la plataforma, Douglas Brown, respecto a una "escaramuza" entre un alto cargo de BP y empleados de Transocean.
En la discusión se hablaba de retirar barro pesado del pozo Macondo y reemplazarlo por agua de mar, en un intento por concluir las operaciones de perforación y sellar el pozo con cemento.
Investigadores del Congreso estadounidense sostienen que BP y Transocean decidieron el 20 de abril comenzar a sacar lodo desde el interior de la tubería de perforación, pese a que un responsable de BP describió las pruebas de presión que se realizaron en el pozo como "insatisfactorias".
Debido a que el agua es más ligera y menos densa que el lodo, el procedimiento permitía que una gran cantidad de gas metano inflamable saliera de la tubería de perforación, que se incendió y provocó el catastrófico fuego, según documentos divulgados por el comité de energía y comercio de la Casa de Representantes de Estados Unidos.
El panel llamó para testificar a dos responsables de BP que se negaron a presentarse en la audiencia como partes interesadas en la investigación.
El martes, un tercer funcionario de BP también se negó a dar testimonio ante la posibilidad de que lo inculparan por el accidente, tras recibir una citación del panel.