Pymes y Emprendedores

Cómo diferenciarse del resto de candidatos en la búsqueda de empleo



    Hace dos años, Jorge Schnura, Eiso Kant y Philip von Have, como millones de jóvenes en nuestro país se encontraban buscando prácticas para trabajar en empresas. Al comparar sus currículos, llegaron a la conclusión de que eran idénticos pese a ser personas muy diferentes. Así surge Tyba, financiándose en un primer momento gracias a los ahorros de sus creadores y con el objetivo primordial de la diferenciación de becarios a los ojos de las empresas en función de factores relevantes como la personalidad, las habilidades, experiencias...

    Así, Tyba es una plataforma que conecta a jóvenes candidatos con posibles empleadores que buscan perfiles junior que puedan encajar en sus plantillas. "Es como un departamento de RRHH automatizado", explican sus creadores. Desde su nacimiento, no ha tenido dificultades para encontrar clientes pues, según Schnura, "en la actualidad las soluciones que usan las compañías para encontrar el mejor talento son ineficientes".

    Por otro lado, esto también ha supuesto un obstáculo dado que las experiencias negativas de los usuarios en portales de empleo producen desconfianza ante una nueva web como Tyba. Y es que, "si los candidatos no se inscriben, las empresas tampoco lo harán".

    La actitud de los jóvenes

    Tyba no se dirige únicamente al becario que busca su primer empleo, si no que su target acapara también a personas más experimentadas. "Hoy en día los jóvenes no buscan un empleo sin más, quieren algo que les llene, contribuir al mundo de manera positiva. Tienen una actitud muy loable" destaca Eiso Kant.

    Sin embargo, añade, también "se ha perdido la costumbre del esfuerzo". "Internet ha hecho que tengamos millones de cosas a nuestro alcance sin tener que esmerarnos, lo que nos ha vuelto un poco vagos a los jóvenes de hoy en día", asegura.

    Además, señala que el emprendimiento español está "creciendo mucho y cada vez con más empresas exitosas. Somos muy competitivos en costes y, gracias a las últimas reformas, nos hemos convertido en un país de gran atractivo para inversores extranjeros, muy presentes dentro de nuestras fronteras. Y es que "sin inversión no hay start ups, y sin start ups no hay empleo" asegura Schnura.

    "La clave para todo emprendedor es equivocarse, y hacerlo rápido. Nos enfrentamos a incógnitas y tenemos recursos limitados por lo que debemos ser ágiles ante las reacciones del mercado y adaptarnos a ellas".