Pymes y Emprendedores
El mangostán, la 'reina de las frutas en Asia' aterriza en nuestro país
Nacida en 2002, Xango se encuentra presente en 35 países y ya ha facturado desde sus inicios 2.000 millones de euros
"En una cena en 1990, mi socio probó un postre de mangostán y le encantó". Así empezó lo que derivaría en el nacimiento de Xango, la empresa fundada por Aaron Garrity, especializada en la venta de artículos basados en esta fruta.
"Trabajé en una tienda de productos naturales, pero nunca había oído hablar del mangostán" explica. Movido por la curiosidad empezó a indagar y descubrió que ésta "tiene más capacidades antioxidantes que la uva. Además, también posee propiedades antiinflamantorias y aporta múltiples beneficios a la salud" señala Garrity.
Los beneficios del mangostán se deben a su alto contenido en xantones, una sustancia química natural con un alto poder terapéutico.
Su producto estrella es la bebida de mangostán (un zumo tropical con ciertas notas agrias de sabor). Sin embargo, la empresa comercializa también artículos de belleza (cremas, tónicos) y de aseo (champú, acondicionador, etc).
Además de su materia prima, la forma de comercialización es otro punto diferencial de la compañía. Xango no emplea los canales de tráfico tradicionales. " Nuestra empresa funciona a través de la venta directa. Un usuario gana dinero si recomienda nuestro producto a otro y éste lo compra" explica Garrity.
En 2002 nació la empresa gracias a una financiación obtenida con fondos propios y externos, y actualmente, ya se encuentra presente en 35 países ( 14 en Europa) y cuenta con 1.100 empleados en todo el mundo, además de continuar creciendo.
Este año, esperan estar presentes en 42 países. El truco, según Garrity, reside en que " a diferencia de lo que habitualmente ocurre, es el cliente el que se pone en contacto con nosotros. Por eso creemos que vamos a tener éxito en España y no pretendemos llevar a cabo acciones publicitarias" indica.
Los directivos de la compañía están muy contentos con la acogida que está teniendo Xango a nivel global. Sin embargo, Daniel Laroque, presidente de la empresa en Europa explica que si tuviera que modificar algo de su estrategia empresarial, habrían llegado a España hace 2 o 3 años "porque estamos más identificados con esta cultura" explica.
Responsabilidad social
La compañía quiere colaborar con parte de sus ingresos en la mejora de la calidad de vida de los niños en todo el mundo. Por eso, la empresa ha creado la fundación Xango Goodness, una entidad benéfica que interviene en proyectos humanitarios, expediciones médicas,o acciones relacionadas con la educación sanitaria.
"De todos los productos que vendemos donamos un porcentaje a nuestra fundación" afirma Garri- ty. "Estamos en contacto con ONG con las que queremos trabajar y llevamos a cabo acciones en todo el mundo. La última fue la llamada operación sonrisa, con la que hemos conseguido operar a 1.146 niños con problemas en la boca" aclara.