Pymes y Emprendedores
Cómo presentar un plan de empresa que convenza a bancos e inversores
- El emprendedor debe aportar una idea de negocio que sea viable en el mercado
César García Jaramillo, director general de On Retrieval, empresa especializada en recuperación de datos, empieza su aventura empresarial hace seis años. A diferencia de otros emprendedores, él desarrolló un plan de negocio para encontrar financiación. "Elaboramos el plan de negocio para encontrar la subvención correcta, y para ello aprovechamos el servicio prestado por la Ventana Única Empresarial", explica.
Pero, ¿por dónde hay que empezar para elaborar un plan de empresa? ¿A quién tenemos que acudir? La mayoría de los expertos está de acuerdo en que los jóvenes empresarios deben visitar a un asesor que les guíe desde el principio. Es más, cada comunidad autónoma cuenta con su correspondiente oficina o ventanilla única empresarial, que ayuda al emprendedor en todo el proceso.
En estas oficinas, el joven empresario tiene la oportunidad de presentar su idea de negocio y explicar por qué cree que será rentable o viable en el mercado. Es una especie de guión o memoria, que sirve como base y punto de partida de todo el desarrollo empresarial. Así, César García añade que "este documento es una radiografía de la compañía que debe actualizarse y no un proyecto puntual que se lleva a cabo al principio de todo".
Este informe explica el objetivo del negocio, el currículum de los empleados, el mercado al que va dirigido, la evolución previsible, por qué se va a diferenciar de otras sociedades semejantes, las ventas esperadas, así como los recursos técnicos y económicos necesarios, entre otros aspectos.
Las partes del modelo
La mayoría de los planes de empresa se divide en varias secciones, que tienen que tener en cuenta un estudio económico financiero, explicar la forma jurídica que mejor se adopta a la compañía, definir la imagen de la empresa e indicar por qué ésta se diferencia de otras en el mercado, o cómo gestionar la plantilla (departamento de recursos humanos).
En un primer lugar, hay una presentación de la idea de negocio, que la resume y explica su rentabilidad. Según César García, es importante definir el concepto en pocas palabras. "Todo el documento debe estar presentado en dos o tres páginas. Es importante que la idea y la viabilidad de la empresa estén correctamente explicadas en las dos o tres primeras líneas del proyecto", indica. Un segundo punto que el emprendedor no puede olvidar es el plan de marketing, es decir, incluir un resumen del sector al que la empresa va a lanzarse. Así, definir el modelo, explicar por qué es diferente y cuáles son los aspectos o servicios que la distinguen de otras compañías. Es fundamental que la empresa ofrezca un servicio o producto diferente al mercado, tanto en la publicidad como en los precios, el modo de trabajo, el target, entre otras cosas.
Finalmente, la pyme debe definir en el proyecto empresarial la forma jurídica que va adoptar y el estudio financiero, es decir, se trata de estudiar a priori la rentabilidad económica de la futura compañía.
Puntos positivos y negativos
Uno de las pasos fundamentales que debe tener en cuenta la joven empresa es definir los puntos negativos y positivos de la futura compañía. Para ello, los socios deben reunirse y recopilar toda la infor- mación necesaria sobre la empresa. Es el momento de llevar a cabo el método de marketing denominada DAFO (Debilidades, Oportunidades, Fortalezas y Amenazas). "Es una herramienta de diagnóstico que ayuda a organizar las ideas antes de empezar un plan de negocio o una estrategia", dice Fernando A. Rivero, consultor de Tatum, gestora comercial y de marketing. De este modo, "se pueden encontrar los principales problemas de la empresa e intentar solucionarlos o minimizarlos".