Su presidente pide "prudencia" y llama a la "delicadeza necesaria para equilibrios frágiles"MaDRID. En el seno del Consejo Económico y Social (CES) hay incertidumbre ante la posible entrada de los autónomos en este organismo. De hecho, fuentes internas del propio CES reconocen que hay resistencia por parte de los representantes de los sindicatos y la patronal a que los más de tres millones de trabajadores autónomos cuenten con una delegación en este órgano consultivo, como llevan reclamando desde hace años.El presidente del CES, Marcos Peña, todavía no ha hecho pública su opinión; ni lo hará hasta que el Parlamento apruebe (si llega el caso) la proposición de ley que amplía el número de miembros para que los autónomos tengan cabida. Sin embargo, asegura en un entrevista a este periódico que "sí hay ese temor general de cuando se modifica una composición en temas delicados y de equilibrios frágiles. Nunca se sabe hasta donde se puede llegar".Aunque no niega el derecho de este colectivo a sentarse en el CES con los demás representantes sociales y sindicales (quienes consideran que ellas ya representan a los autónomos), Peña advierte de que "no es el único colectivo que quiere participar". En su opinión, la solución pasa por negociar "con prudencia y con tranquilidad"."Quizás tengamos que más disponibilidad hacia otros órganos consultivos (en referencia al futuro Consejo Estatal del Autónomo). Es un debate inminente pero no realizado", sentencia Peña.