madrid. Desde el pasado viernes está en vigor el nuevo reglamento europeo que regula el control de las fronteras en el mercado interior de la UE, concretamente en las fronteras de Schengen, de las que se excluyen las islas británicas, Ceuta, Melilla y otros territorios franceses de ultramar. Por contra, el reglamento se aplica a Dinamarca, Noruega, Islandia o Suiza.El reglamento se aplicará al cruce de personas por las fronteras europeas y está especialmente focalizado en la lucha contra la inmigración ilegal, pero no afectará a la libre circulación de ciudadanos de la Unión Europea o de terceros países. En este caso, se mantiene el sellado de los documentos de nacionales de terceros países. El reglamento también habilita a los Estados miembros para restablecer sus controles fronterizos en caso de amenaza grave para el orden público.