Es la cuarta ciudad de la UE preferida por los empresarios; Madrid ocupa el séptimo lugarLa calidad de vida empieza a ganar importancia sobre otros factores para la elección de sede madrid. "Barcelona ha sido capaz de crear una imagen de ciudad moderna y cosmopolita". Una frase mezcla de admiración y envidia que se oye en más de una conversación en las calles capitalinas. Y una idea que ha calado muy hondo en muchos directivos europeos, que le han dado a Barcelona el cuarto puesto en la lista de ciudades más apetecibles para convertirse en sede de empresas, detrás del podio clásico de Londres, París y Francfort. Lo dice el estudio European Cities Monitor -que va por su decimosexta edición- elaborado por la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield, para el que se han entrevistado a 540 ejecutivos de importantes corporaciones, y en el que Madrid también sale bien parada con un séptimo puesto. De hecho, España es el único país con dos ciudades entre las diez primeras del ranking. Los aspectos que se han valorado a la hora de ponderar a estas urbes son doce, por este orden de importancia: la facilidad de acceso a los mercados, la cualificación de los empleados, los enlaces de transporte con otros países, la calidad de las telecomunicaciones, los costes laborales, el marco fiscal y los incentivos por parte de los gobiernos, la disponibilidad de espacio para oficinas, el precio de éstas, los idiomas que se hablan, la calidad del transporte público, el nivel de vida y el grado de contaminación. Y de estas doce categorías, Londres es la ganadora absoluta, con siete primeros puestos. En esta clasificación hay debutantes, como Birmingham (en el puesto 19), Leeds (en el 28) y Bucarest, un puesto más abajo que esta última ciudad británica. Un triunfo con maticesRoger Cooke, consejero delegado de la consultora, matizó ayer durante la presentación que los resultados del ranking responden a "percepciones, que no siempre son realidades". Lo cierto es que el sabor de boca se vuelve algo agridulce leyendo la letra pequeña, ya que las ciudades españolas obtienen la mejor nota en las categorías de menor peso en la clasificación, como el espacio para oficinas, el transporte público y la calidad de vida. Precisamente en este último aspecto es donde Barcelona y Madrid tienen mejor puntuación, con la medalla de oro y de bronce respectivamente. "Para los encuestados, empieza a ser más importante la calidad de vida que otras cosas. En las ciudades españolas, además de que hay sol más de un día a la semana, se vive; cosa que no se puede decir de Londres o Nueva York", comentó Roger Cooke, con un marcado acento anglosajón y una enorme sonrisa. Quizá lleve tiempo viviendo en España.