Fidalgo dice que el futuro Estatuto "no le gusta porque inventa relaciones y fragmenta el mercado de trabajo"madrid. Si Don Quijote y Sancho toparon con la Iglesia, los trabajadores autónomos lo han hecho con el sindicato Comisiones Obreras. Su líder, José María Fidalgo, aprovechó ayer un encuentro con la prensa para explicar su postura sobre la posible entrada de los autónomos en el Consejo Económico y Social (CES) y su futuro Estatuto. Y en ningún caso se mostró partidario de ambas medidas; más bien todo lo contrario.Fidalgo aseguró que su sindicato no es partidario de modificar la composición del CES (la iniciativa legislativa lleva más de 40 aplazamientos en el Congreso después de aprobarse en el Senado por unanimidad) abriendo la representatividad al autónomo, según informan Europa Press y Servimedia. El argumento es que dicho órgano "incumbe a las organizaciones más representativas del capital y del trabajo por las materias que trata". Esta frase puede interpretarse como un ataque directo contra las principales asociaciones de autónomos, que llevan meses reclamando su presencia en el CES.Reventar el mercado laboralFidalgo tampoco ve con buenos ojos el futuro Estatuto del Trabajador Autónomo, a poco más de un mes de que el Consejo de Ministros dé luz verde a su tramitación después de casi un año de elaboración.El secretario general de CCOO reconoce abiertamente que a este sindicato "no le gusta" el texto porque "inventa progresivamente relaciones laborales específicas que fragmentan el mercado de trabajo y debilita el Estatuto de los Trabajadores". Sin oponerse a que los derechos y deberes de este colectivo (integrado por más de tres millones de personas) estén regulados, se mostró partidario de que queden reflejados sólo en los contratos laborales que firmen.Estas declaraciones de Fidalgo se producen en vísperas de que el Ministerio de Trabajo y las principales organizaciones de autónomos firmen el texto del Estatuto el próximo día 26 de septiembre, un año después del primer borrador.