madrid. Sueldos base que no llegan a los 900 euros durante el primer año y 1.300 en el quinto y, sobre todo, una carga de horas agotadora que puede superar las 80 horas semanales son las condiciones que quieren mejorar cuanto antes los cerca de 18.000 médicos internos residentes (MIR) en España. Los especialistas en formación recordarán este miércoles a la ministra su compromiso de aprobar el Estatuto del Médico Residente que debe resolver la precaria situación laboral de estos profesionales. Para ello las principales organizaciones del sector celebran en Madrid el Primer Foro estatal sobre problemática y alternativas de los médicos especialistas en formación, con el fin de forzar no sólo la aprobación del Real Decreto, sino también la revisión del borrador acordado en febrero y que no responde a las aspiraciones formativas, docentes y laborales de los médicos.El borrador acordado por Sanidad recoge un incremento medio del 18 por ciento de los sueldos base de los MIR y liga los aumentos a las subidas fijadas para el personal estatutario del Sistema Nacional de Salud. Además establece que la jornada ordinaria de trabajo de los residentes no exceda de las 37,5 horas semanales y no se puedan realizar más de siete guardias al mes. Incluye medidas para conciliar la vida laboral y personal de los residentes y propone una norma que regule los aspectos formativos.El sindicato médico mayoritario CESM se desvinculó de hecho del texto acordado en febrero por el Ministerio de Sanidad y las centrales sindicales (FSP-UGT, CC.OO., CIG y SATSE) que, según fuentes del Ministerio, se encuentra pendiente del visto bueno del Ministerio de Trabajo y todavía no se ha remitido al Consejo de Estado. El cese de Consuelo Sánchez Naranjo, directora general de Recursos Humanos del Ministerio es, para las organizaciones médicas, una "prueba palpable del fracaso" en una de las escasas competencias que atesora todavía Sanidad.