La herramienta atiende las entregas generadas por el comercio electrónicoEl comercio electrónico es ya un mercado en pleno auge, pero todavía necesita herramientas físicas para completar sus prestaciones y ampliar sus posibilidades. De ello se dio cuenta Pablo Carrillos, director técnico de Drop-Point, y se lanzó al mercado con una nueva iniciativa que mejora las prestaciones para los usuarios de la red, cada vez más numerosos y exigentes. El primer paso que deben de seguir todos los emprendedores, si quieren lanzar un producto innovador, es comprender las necesidades del público y del mercado. En el caso de Drop-Point, este proceso de reflexión se gestó en una empresa de transportes, desde la cual comprendieron cuáles podrían ser las demandas de los usuarios del comercio electrónico. "Vimos que cada vez es más complicado realizar los repartos, ya que por un lado estamos mucho menos tiempo en casa para recibir la mercancía y, por otro, las compras por Internet están en continuo auge", asegura Carrillos, quien una vez detectado el problema, se propuso solucionarlo. De esta manera surgió Drop-Point, un servicio de consigna inteligente para recogidas y entregas de envíos 24 horas al día. "Esta herramienta supone una ventaja con respecto al envío de los pedidos de Internet a domicilio, ya que no es necesario estar en casa durante todo el día para recibir algo, o para esperar al mensajero en el caso de una devolución", apunta Carrillos. Este sistema de consignas automáticas permite gestionar los pedidos de forma remota y desde casa. Para ello, los clientes se registran de forma gratuita en la web de Drop-Point y seleccionan la consigna en la que quieren recoger el paquete. "Una vez domiciliado el envío, los clientes reciben un correo y un mensaje de texto al móvil cuando el envío está ya depositado", afirma Carillos. El siguiente paso es acudir al establecimiento donde se encuentra la consigna e introducir en la pantalla el código de entrega, el DNI y la firma del cliente. Sólo de este modo, el cajón que contiene el envió se abrirá para su recogida. El precio por este servicio, que acaba de aterrizar en el mercado doméstico español, es de un euro por recogida, sin contar con los gastos de envío de cada comerciante. Cámaras cenitales y frontales En lo que respecta a la seguridad del sistema, Carrillo afirma que mantienen un alto grado de control sobre las gestiones que se llevan a cabo en la consigna. "Todas las operaciones son grabadas por cámaras para verificar la entrega del mensajero y la recepción por parte del cliente de sus paquetes". Las grabaciones e imágenes captadas quedan registradas en la Agencia Española de Protección de Datos y son eliminadas de forma automática a los 30 días de su creación, pero, mientras tanto, todos los movimientos que captan se pueden visualizar a través de Internet. El servicio tiene con un procedimiento para los envíos que no han sido retirados en un plazo máximo de tiempo y que serán devueltos al lugar de origen tras avisar al destinatario. Para que el proyecto se materializase, Pablo Carrillos invirtió en un primer momento unos 20.000 euros, y aunque por el momento las dos únicas unidades de consignas se encuentran en Petrer, Alicante, la idea de Drop-Point es implantar este sistema en todo el país, ya sea por cuenta propia o a través del modelo de franquicia en comercios con un horario amplio como tiendas, farmacias 24 horas o parkings. Gracias a iniciativas como Drop-Point, el comercio electrónico supera ya el espacio online y continúa consolidándose en los mercados.